El central que anotó el gol del título del Metal, trabaja como mozo. “Me gano la vida con las propinas, pero el sueño de ser jugador profesional lo tengo intacto”, confió en La Liga Radio.
Eric Giménez y el título del metal: "Fue un desahogo enorme porque el grupo se lo merecía."
"El gol es de todos, es colectivo. Todos somos uno, todos somos hermanos", describió Eric Giménez.
Eric Giménez convirtió el gol que valió el título del Promocional Amateur de Deportivo Metalúrgico que lo pone ahora de cara a disputar el duelo por la Promoción con Puerto Nuevo para llegar a la Primera C y es una muestra de los grandes sueños que hay detrás del ascenso en el fútbol argentino.
“Hay que buscar el espacio para ir a trabajar, hacer cada uno sus changas. Así es el ascenso. No podemos vivir del fútbol, pero hacemos todo lo posible para ir a entrenar dos o tres veces por semana para poder ser citado el fin de semana”, explicó Eric.
El cuerpo técnico de Metalúrgico que encabeza Juan Steinbach, realiza los entrenamientos a las 7 de la mañana para poder acomodarse a los distintos trabajos y horarios de los que también estudian.
“A veces no tenemos para la SUBE y ponemos un punto de encuentro con alguno que tiene movilidad para viajar juntos”, confió
En cuanto a su labor, señala “Trabajo de cualquier cosa”. “Laburé de un montón de cosas, pero donde más me rinde en lo económico es de mozo por las propinas.”
“Primero hay que alimentar a la familia, llevar el pan a la casa y después está el fútbol”, sentenció Eric, que igualmente tiene el anhelo de poder dedicarse a este deporte.
“El sueño de ser jugador profesional lo tengo intacto. Es una promesa que le tengo que cumplir a mi papá. Voy a firmar mi primer contrato como jugador profesional. Estoy haciendo todo lo posible para llegar a eso objetivo también”, aseveró.
“El sueño del ascenso es lo más lindo. Estamos a dos finales de cumplirlo”, destacó el otro gran objetivo del año para el Metal.
En cuanto a su aparición como goleador ante Ezeiza, Eric señaló: “Dios me puso ahí en el momento justo y se me dio. No me lo esperaba. Fue como una intuición de 9”.
“Queríamos quedarnos en el festejo y que termine el partido ahí. Fue un desahogo enorme porque el grupo se lo merecía. Por suerte se pudo lograr el objetivo y ahora falta el próximo objetivo, que es el más importante de todos”, insistió.
“Mucha actitud y compañerismo. El gol es de todos, es colectivo. Todos somos uno, todos somos hermanos. Juan (Steinbach) siempre nos tiró la positiva. Nos acompañó, lo que necesitábamos estaba disponible. Una gran persona y se lo merece también. Gracias a él, mis compañeros como yo, estamos jugando ahí”, destacó.
Consultado por la similitud con Cuti Romero, apuntó: “Me encanta. Me siento parecido a él en cómo voy a trabar, a luchar.”