Científico pilarense investiga si el cannabis puede ayudar a combatir las "súperbacterias"
Lo desarrollan Paulo Maffía y su equipo en la Universidad de Hurlingham. El abuso de antibióticos provocó que estos ya no sean tan eficaces.
21 de noviembre de 2025 - 11:38
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Paulo Maffía (en el centro) junto a su equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Hurlingham.
Foto: Unahur.
El uso excesivo de antibióticos durante décadas que realizó (y realiza) gran parte de la población provocó la aparición de cepas resistentes, reduciendo progresivamente la eficacia de los tratamientos habituales. A su vez, la problemática tiene su reflejo en situaciones que van en aumento, como las infecciones intrahospitalarias.
Frente a este desafío global, el Laboratorio de Aplicaciones Biotecnológicas y Microbiología de la Universidad Nacional de Hurlingham, conducido por el científico pilarense Paulo Maffía, investiga nuevas alternativas terapéuticas, como elcannabis.
Paulo Maffía en laboratorio
Paulo Maffía en el laboratorio de la Universidad Nacional de Hurlingham. Además es investigador del Conicet.
Foto: Unahur.
“Es sumamente importante estudiar y concientizar sobre los factores que favorecen la aparición de la resistencia, así como avanzar en el desarrollo de nuevas drogas activas frente a estas superbacterias”, señala Maffía, director del laboratorio.
El equipo trabaja con péptidos antimicrobianos -proteínas con propiedades antibióticas- y con cannabidiol, un compuesto presente en la planta de cannabis. Ambos enfoques resultan prometedores para diseñar fármacos que, combinados con otros antibióticos, puedan aplicarse en la práctica clínica para el tratamiento de infecciones.
Los resultados de estas investigaciones son fundamentales para comprender el desarrollo de nuevas moléculas que puedan hacer frente a problemáticas que están en aumento, como las infecciones intrahospitalarias.
Sin embargo, debido a la baja rentabilidad que ofrecen los antibióticos, la industria farmacéutica suele desatender este campo. Por eso, el trabajo de las universidades públicas cobra un valor estratégico para abordar uno de los principales problemas de salud pública.
“La UNAHUR ha apoyado desde un comienzo la investigación científica”, destacó Maffía, quien además es investigador del Conicet.
De los comienzos al cannabis
La investigación se inició en 2014 y fue trasladada a las instalaciones de la Universidad Nacional de Hurlingham en 2018. El grupo posee integrantes de instituciones ya mencionadas como el Conicet, así como la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) de la Provincia de Buenos Aires. En su trabajo halló avances prometedores en el uso de péptidos naturales y de diseño, así como del cannabis medicinal.
Y agregó: “El mayor riesgo se encuentra en las infecciones intrahospitalarias, las cuales en su gran mayoría están causadas por bacterias resistentes. Pero esto no ocurre únicamente dentro de los hospitales: en la comunidad también se registran casos frecuentes”.
En este escenario, cada vez más infecciones requieren antibióticos “y las dosis necesarias hoy son mucho más altas que las usadas hace 15 años”.
En 2020, el equipo incorporó el estudio del cannabis medicinal, desde el mejoramiento de la planta hasta la evaluación de sus principios activos. Maffía explicó que “el principal objetivo es encontrar principios activos que puedan actuar solos o en combinación con otros antibióticos frente a bacterias que hoy en día muestran resistencia a la mayoría de los fármacos de uso habitual”.
Por lo pronto, el grupo ya patentó tres péptidos antimicrobianos de diseño, al tiempo que publicó sus avances en revistas científicas y congresos internacionales. Desde la zona oeste y con un pilarense a la cabeza podrían hallarse soluciones a una problemática que enciende las alarmas a nivel mundial.
Hay equipo
El equipo de investigación conducido por Paulo Maffía está conformado por Melina Martínez, Jésica Ianiccelli, Matías Garavaglia, Merlina Corleto, Melanie Weschenfeller, Santiago Urrea Montes, Ángel Arias, Diego Patanian, Rocío Rodríguez y Gisela Pigliapochi.
Fuente: Universidad Nacional de Hurlingham / Clarín.