Trabajadores despedidos de la empresa ILVA volvieron a protestar este jueves, luego que venciera el plazo de la conciliación obligatoria sin que la empresa pagara las quincenas adeudadas.
Venció la conciliación obligatoria y la empresa sigue debiendo salarios. Trabajadores cortaron accesos y se movilizaron. "Vamos a ir hasta las últimas consecuencias", advierten.
Trabajadores despedidos de la empresa ILVA volvieron a protestar este jueves, luego que venciera el plazo de la conciliación obligatoria sin que la empresa pagara las quincenas adeudadas.
Los trabajadores cortaron desde las 5 de la mañana la Calle 9 uno de los principales accesos al Parque Industrial de Pilar. En medio de un inédito operativo policial, que incluyó escuadrones de la Gendarmería, la protesta se trasladó luego a las oficinas del consorcio del Parque (sobre la rotonda de la calle 9), donde arrojaron huevos y colocaron carteles con los rostros del presidente de ILVA, Francisco Zanón y de Patricio Colombo, accionista de la firma y presidente de la Cámara Empresaria del complejo fabril.
“Ayer tuvimos audiencia en el Ministerio. No tuvimos ningún tipo de respuesta. Ya tendríamos que haber cobrado el viernes de la semana pasada la quincena correspondiente al mes que está corriendo y no hay ningún tipo de respuesta”, afirmó Juan González, trabajador despedido de la empresa.
“Estamos con conciliación obligatoria, siguen con las puertas cerradas por lo cual nos da la impresión de que esta gente no tiene la intención de pagar salarios o indemnización, manifestándonos para ver si alguien nos escucha”, agregó.
A diferencia de las anteriores protestas, están habilitados al tránsito el acceso por El Petrel y por el country CUBA. Aunque en primeras horas de la mañana la circulación era reducida a una sola mano, en estos momentos se transita con normalidad en ambas arterias.
Marcelo Barrionuevo, uno de los delegados de los trabajadores, señaló que la empresa “no trajo nada” a la última audiencia de conciliación realizada el miércoles.
“Estamos con angustia y bronca porque atrás de cada de nosotros hay una familia”, contó
“Yo personalmente no tengo un peso, estamos subsistiendo con la mercadería que nos da la logística de algunos con algunas agrupaciones, algunos movimientos, y el municipio que nos trajo mercadería”, contó Barrionuevo.
“Si ellos nos doblegan a nosotros, no nos ponen de rodillas a nosotros, ponen de rodillas a todo el Parque”, advirtió el delegado. “Pero tenemos fuerza porque la comunidad pilarense nos apoya, gente trabajadora nos da aliento, además de nuestras propias familias. Yo tengo siete hijos, y mis siete hijos me están apoyando en esto, porque o si no, no tenemos fuerza”, dijo.
“Hay compañeros que están alquilando, pero no está la plata y los van a desalojar”, alertó. Y agradeció “la solidaridad de todo el pueblo pilarense que nos está dando una mano. Nosotros estamos más fortalecidos que nunca y vamos a ir hasta a las últimas consecuencias”.