La fábrica de cerámicos ILVA busca reabrir su planta del Parque Industrial de Pilar, cerrada desde fines de agosto. Para eso, ofrece recontratar a 40 de los 300 obreros despedidos, con una reforma de las condiciones de trabajo que implica una fuerte quita de beneficios.
Los trabajadores tomaron conocimiento de la propuesta hace pocos días, en una audiencia con el juez Hernán Papa, titular del Juzgado en lo comercial Nº 12, donde tramita el pedido de la empresa de declarar el concurso de acreedores. La respuesta fue un rotundo rechazo.
“El jueves tuvimos una audiencia con el juez porque que la empresa pidió entrar en concurso de acreedores. Le comentamos que la empresa hizo un fraude laboral primero de dejar a 300 familias en la calle sin indemnizaciones ni sueldo”, contó a El Diario el delegado Marcelo Barrionuevo, uno de los despedidos.
“Ahora la empresa llegó con una propuesta de reabrir con 40 trabajadores en tres turnos. Nos cambian la rotación, el salario sin beneficios, sin transporte y sin el comedor, con un sueldo precarizado”, describió el trabajador.
Pero aseguró que el rechazo fue unánime: “Acá entramos los 300 o no entra nadie”.
Mientras tanto, los trabajadores cumplen 80 días de acampe frente a la fábrica cerrada y declaran que “estamos más fuertes que nunca”.
“Estamos dispuestos a todo, porque todavía nos siguen debiendo indemnizaciones y dos meses de sueldo”, sostuvo Barrionuevo.
Si la Justicia convalida el pedido de concurso de acreedores, ILVA ganará tiempo frente a los reclamos de los acreedores aún no cobraron sus indemnizaciones. A cambio, la administración de la empresa queda bajo la supervisión de un síndico, quien fiscaliza las operaciones para garantizar el cumplimiento del proceso. Mientras tanto, la empresa puede seguir operando mientras se negocia con los acreedores.
Actualmente, ILVA está paralizada, con la totalidad de sus trabajadores despedidos, pero tiene en marcha una búsqueda laboral activa para reemplazar cada puesto, mientras que las máquinas están a punto para volver a producir.