Atropelló, mató y fue a buscar a su hijo al colegio

Es el arquitecto que el lunes embistió a un hombre en Panamericana. Una hipótesis lo complicaría: ¿Se conocían víctima y victimario?

Por Redacción Pilar a Diario 24 de mayo de 2018 - 10:05

En la tarde del lunes, Edgar Nava, de 58 años y oriundo de Laferrere, fue atropellado en la autopista Panamericana, a la altura del kilómetro 45,500, luego de haberse bajado de su auto, un Renault Sandero. La víctima falleció horas más tarde en el Hospital Sanguinetti.

No obstante, el conductor que lo atropelló no detuvo la marcha, siendo detenido al día siguiente: se trata de Juan Pablo Sbarbati, arquitecto de 49 años, quien manejaba un Honda Civic.

Con el paso de las horas, se van conociendo nuevos detalles y se abren líneas investigativas: por ejemplo, está confirmado que luego de atropellar y matar a Nava, Sbarbati fue a buscar a su hijo al colegio. Además, la Justicia maneja la hipótesis de que no se habría tratado de un accidente común, ya que víctima y victimario habrían tenido algún tipo de relación laboral.

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La Justicia logró determinar que, luego del hecho (ocurrido pasadas las 16), el arquitecto retiró a uno de sus hijos del Colegio Saint John´s , ubicado a la altura del kilómetro 49, para luego seguir viaje hasta su casa, en un barrio cerrado de Fátima. Incluso también lo tomaron cámaras de la estación de servicio ubicada junto al establecimiento educativo.

Sin embargo, el dato más relevante tiene que ver con una posible relación previa entre Sbarbati y Nava, quien trabajaba como yesero. De hecho, el hombre fue embestido en la misma zona en la que el arquitecto tiene su estudio, Arqcons, ubicado en la calle Caamaño.

De confirmarse que ambos se conocían, alimentado de una hipótesis que habla de una discusión previa entre ambos, la situación del arquitecto podría cambiar en forma considerable.

El detenido declaraba esta mañana ante el fiscal Raúl Casal, de la UFI 1 de Pilar. En principio quedó imputado en una causa caratulada como “homicidio culposo”.

El día de la detención, su auto presentaba una abolladura en el lado derecho del capó, más el faltante de espejo del mismo lado.

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