Cuando de ingenio se trata, no hay dudas que la creatividad de los argentinos no tiene techo. Sino que lo diga Anibal Querol quien, en plena pandemia, no tuvo mejor idea que fabricar – tal como lo describe su nombre- una mezcla perfecta de una cinta deportiva con una bicicleta.
La “Bicintacleta” es la nueva sensación de los medios de transporte con dos ruedas. Es única, distinta, novedosa. Es una nueva forma de hacer actividad física también.
Anibal nacío en Remedios de Escalada, partido de Lanús, y junto al resto de los integrantes de su familia continúan con la empresa creada por su abuelo hace más de 60 años, dedicada a la fabricación de cuadros de bicicletas.
El proceso de fabricación implicó meses de prueba y error. Llevó mucho tiempo armarla, porque a medida que iba avanzando se encontraba con nuevas dificultades. No funcionaba de la manera que debía, entonces se tenían que ir buscando diferentes alternativas e ir probando.
Con el producto finalizado, el inventor lo empezó a promocionar en las redes, principalmente en TikTok. El invento no tardó en viralizarse, y junto con los "Me gusta" llegó la advertencia de sus seguidores: había que patentarlo cuanto antes.
Pero el registro de la “Bicintacleta” trajo aún más obstáculos. Aníbal se enteró de la existencia de un producto similar creado en Holanda. Por lo tanto, al no ser considerado como un artículo novedoso, el primer intento de patentarlo fracasó.
Pero el producto no era igual. El holandés es eléctrico, funciona con ayuda de un motor, y el argentino, es con transmisión manual.
Después de que nadie reclamara el nombre durante un año y medio, aquella invención que nació en Lanús pasó a ser una marca registrada. Y actualmente su creador está a la espera de que sea aprobada una segunda patente, correspondiente a una serie de modificaciones y mejoras que le hizo a la “Bicintacleta” durante los últimos meses.
Esta creación un tanto difícil de imaginar, que mezcla dos actividades en una, tiene un valor que equivale a una bicicleta de entre media y alta gama y puede ser adquirida a través de la cuenta de Instagram @bicintacleta.
Lo cierto es que poco a poco ella se va metiendo en el corazón de todos los argentinos, que preguntan, indagan y hasta sueñan con probarla.