Matías Rossi le puso una estrella más a una trayectoria notable en el automovilismo nacional y quedó al borde de alcanzar a una leyenda como Juan María Traverso en el TC2000.
El Misil llegó a su 11º título nacional y quedó a una corona de Juan María Traverso. “Hay que disfrutarlo como si fuese el último”, describió.
Matías Rossi le puso una estrella más a una trayectoria notable en el automovilismo nacional y quedó al borde de alcanzar a una leyenda como Juan María Traverso en el TC2000.
Matías, con su Toyota, cerró la temporada 2025 del TC2000 con una consagración histórica en Junín al lograr además la primera en la era de los SUV.
El campeonato se definió en la última fecha del 46º Campeonato Argentino de TC2000, disputada en el autódromo Eusebio Marcilla, en donde Rossi aseguró el título tras finalizar tercero en la Final, resultado suficiente luego de que su principal rival y compañero de equipo, Emiliano Stang, sufriera la rotura del neumático delantero izquierdo cuando lideraba la competencia.
Rossi cerró la temporada con dos victorias, cinco podios y tres pole positions, acumulando 193 puntos. En Junín, el triunfo quedó en manos del local Gabriel Ponce de León, también con una Toyota Corolla Cross, mientras que Franco Vivian fue segundo con Chevrolet Tracker. Rossi completó el podio sin arriesgar más de lo necesario para asegurar el campeonato.
“Es emocionante lograr este título. Luego de un año con mucho trabajó con los SUV pudimos reflejar su funcionamiento en Junín. Tengo una satisfacción enorme el poder compartir este campeonato con mi papá y con mi familia”, describió Rossi en el podio apenas coronaba su temporada.
“Me emocioné porque son muchos campeonatos. Es impresionante y a su vez, con una carga emocional que estaba difícil de cerrarlo el campeonato.
"Internamente lideramos desde la primera carrera y sentía que no se podía escapar, pero veía latente esa posibilidad que se escape”, explicó en Carburando Radio.
“Emiliano Stang estaba largando en pole. No había podido cerrar el campeonato en Sanlta, tampoco el sábado en clasificación. La viví con mucho nerviosismo y cuando se concretó el resultado final, me emocioné porque lo veía difícil de cerrar”, recordó.
“Es una sensación hermosa porque trabajamos todo el año buscando este objetivo. Con esta división que hoy tenemos en el automovilismo, que no es buena, nosotros apostamos al TC2000. Toyota como marca decide estar en el TC2000 y le debíamos un campeonato a la marca”, advirtió.
Matías hacía 5 años que no conseguía un título y eso también tenía un peso extra. “Pesa un poquito. Pero la emoción fue más de momento porque sentía la posibilidad de perder el campeonato. Emiliano corrió bien todo el año.”
“A mi edad (41 años) me siento a nivel, espectacular, entreno y tengo las mismas ganas de siempre. Si, empezás a ver que estás más cerca del final. Todo eso generó un nerviosismo”, reconoció el Misil.
“Quién sabe si ganaremos otro título. En algún momento será el último y no lo vamos a saber. Hay que disfrutarlo como si fuese el último”, sentenció el séxtuple campeón de TC2000.
