El pase de la etapa de aislamiento a la de distanciamiento -o de ASPO a DISPO, de acuerdo a las siglas- encuentra a Pilar una franca baja de casos de coronavirus, que lo llevó a niveles de hace dos meses, previo al pico de la pandemia.
El promedio diario de casos está bajando a un ritmo acelerado. Casi tan rápido como el que tuvo para subir desde principios de agosto hasta mediados de octubre. Desde fines del mes pasado, los indicadores de nuevos positivos están cayendo a un ritmo del 20% semanal. Tal como señaló el gobernador bonaerense Axel Kicillof el viernes, al anunciar el cambio de fase, ya no se trata de aplanar la curva sino de aplastarla.
Para estas comparaciones se toman los casos diarios promediados en siete días. De esa manera se reducen los posibles errores por diferencia de carga diaria, que suele disminuir hacia los fines de semana.
Con esos datos, el promedio semanal para el domingo 8 de noviembre fue de 51 casos. Representa un 19% menos que los 63 casos promedio que se registraban el domingo anterior, 1º de noviembre. En ese caso, la baja desde el domingo 25 de octubre al primer día de este mes había sido del 30%. En promedio, la caída supera el 20% semanal.
Para encontrar el mismo nivel promedio de casos diarios hay que remontarse al 12 de agosto, hace casi 2 meses. Justo el momento en el que empezaba a acelerarse el crecimiento de los contagios diarios y Pilar se encaminaba al pico de la pandemia.
Ahora que ya quedó atrás, se puede establecer que el pico se dio cerca del 10 de octubre, con un techo cercano a los 170 casos diarios en promedio. A partir de ese momento, comenzó a bajar. Primero lentamente y luego cada vez más rápido.
Movilidad
La baja de los casos tras el pico de octubre contradice por primera vez el axioma que se había manejado hasta entonces que indicaba que a mayor movilidad más contagios.
Desde las últimas semanas, la baja de los casos coincide con una constante suba de la movilidad de personas en el distrito.
De acuerdo al reporte de Google Mobility, el informe global de la plataforma para colaborar con las estadísticas globales durante la pandemia, Pilar registró a principios de noviembre un nivel de movilidad cercano al 80% del que se daba antes del inicio del aislamiento.
El promedio de la movilidad comparada con enero de este año fue del -22% el 3 de noviembre, último registro publicado por Google.
Si se discrimina por sectores, el de tiendas y farmacias tiene solo un 2% menos de concurrencia física que a principios de 2020, seguido por lugares de trabajo y estaciones de transporte, cada uno con una merma del 19%.
En cuando a las tiendas y el ocio, la actividad está al 70% según la aplicación.
El único registro muy bajo es el que mide la presencia de personas en los parques, que marca un 71% menos que enero. En este caso hay una salvedad: las plazas y paseos de Pilar siguen cerrados pese a que ya está permitido reunirse al aire libre. Y difícilmente Google coloque en la categoría “parques” a las colectoras de la autopista, principal espacio verde de esparcimiento para miles de vecinos de Pilar.
A su vez, las zonas residenciales tienen una presencia de personas 10% más alta que las semanas de enero tomadas como referencia.
La movilidad en Pilar es más alta que el promedio provincial que, para la aplicación, estaba en la misma fecha el 72%.
Google mide la movilidad usando los dispositivos móviles de los usuarios que activa su ubicación en el mapa, por lo que a priori se trata de una información incompleta. De todos modos, resulta útil para medir los cambios en las conductas durante las diferentes etapas del aislamiento.
Con las vacunas más cerca y con la curva en baja, de todos modos, los fantasmas de un rebrote llegan como noticias desde el hemisferio norte. Las conductas responsables y la confirmación de los estudios preventivos podrían evitar una segunda ola que empañe las actuales noticias alentadoras.