El templo evangelista “Del Dios Vivo” ubicado en Manuel Alberti, donde una columna de material cayó sobre el pequeño David Rosso en octubre provocándole la muerte, fue clausurado por el Municipio.
La clausura se efectuó en la tarde del jueves y estuvo a cargo de las direcciones de Obras Particulares y de Coordinación de Inspecciones, dado que el lugar no contaba con la habilitación municipal correspondiente ni el registro del Ministerio de Relaciones y Culto de la Nación, entre otras falencias.
Desde los familiares del chiquito de 10 años que falleció un mes después del episodio, celebraron la medida: “Es una emoción muy grande después de tanta lucha”, explicó Julio Rosso, padre de David, quien agregó que el lugar tampoco tenía los planos correspondientes ni un seguro. Además, el hombre remarcó que “no vamos a parar hasta que mi hijo descanse en paz”.
El último miércoles, familiares del chiquito se presentaron en el Municipio y pudieron dialogar con representantes del gobierno local, quienes se comprometieron a indagar sobre la situación del templo, aunque no les brindaron muchas garantías.
En consecuencia, la madre de David, Sandra Taborda, había adelantado a El Diario que volvería al ministerio de la calle Esmeralda en la Capital Federal y también al palacio municipal.
Finalmente el templo donde ocurrió la tragedia fue clausurado y según pudo saber El Diario, el caso ingresó en el Juzgado de Faltas, donde ya se habría presentado el pastor, responsable del templo evangélico que no depende de ningún otro monasterio.