Un grupo de madres, al frente de un pedido por más seguridad

Sus hijos han sido asaltados y agredidos en los últimos días. Los hechos se repiten en el centro. El viernes, en la plaza 12 de Octubre, pedirán soluciones. Entregarán un petitorio a las autoridades.

12 de mayo de 2010 - 00:00

María Inés Slimmens, María Alejandra Talatnik, Natalia Sánchez y Carina Tonelli, las organizadoras.

 

Son un grupo de mujeres, madres de adolescentes que asisten a colegios del centro de Pilar, y las une un denominador común: sus hijos han sido asaltados recientemente en las inmediaciones de su escuela. Por eso, juntas han organizado una marcha en pedido de soluciones, reclamo que se llevará a cabo este viernes a partir de las 18, en la Plaza 12 de Octubre.

“La idea de la marcha surgió en casa, lo subimos a Facebook y tuvimos adhesión de mucha gente. Así nos contactamos con otras madres”, expresó Natalia Sánchez, cuyo hijo asiste al Instituto Parroquial y, como tantos otros adolescentes, fue víctima en los últimos días de algún hecho delictivo. Acompañada de María Inés Slimmens, María Alejandra Talatnik y Carina Tonelli, explicó en El Diario los motivos de la iniciativa.

Sobre el encuentro del viernes, Natalia afirmó que “será una caminata pacífica para entregar un petitorio en reclamo de soluciones. Algo similar hicieron desde el Parroquial, pero nosotros queremos hacer lo mismo como papás, esperemos ser escuchados”.

Con respecto a la conformación de “corredores seguros”, la idea más factible que ha surgido de las autoridades en los últimos días, las mujeres coincidieron en que “toda propuesta es bienvenida, pero esperamos que se mantenga en el tiempo y que no se termine dentro de 30 días, porque cuando el tema se enfrió nadie se acuerda”.

 

Testimonios

Las madres relataron a El Diario cómo fueron los robos sufridos por sus hijos: el más reciente fue el sufrido por el hijo de María Inés Slimmens, que ocurrió este lunes en la esquina de Tucumán e Hipólito Yrigoyen, mientras cruzaba la calle. Su madre y su hermana lo esperaban a bordo de un auto. “Pasó a las 13.20 aproximadamente, estaba acompañado por otros chicos, pero se fueron yendo a sus casas y él quedó solo. Le metieron la mano en el bolsillo para sacarle la billetera. Él notó que dos chicos los seguían, pero cuando aceleró el paso no pudo cruzar la calle por el tráfico”.

Carina Tonelli contó que “mi hijo (alumno del Parroquial) fue asaltado el viernes. Venía con un compañero caminado por Tucumán desde la ruta 8 y notaron que estaban siendo seguidos por siete u ocho chicos”. Ambos se metieron en una conocida despensa de Tucumán e Ituzaingó, pero cuando el comerciante salió a la vereda el grupo no estaba. “Se fueron por separado y el grupo salió de un estacionamiento, quisieron robarle la mochila a mi hijo, pero los convenció de que sólo tenía un libro, por eso no lo robaron”.

Por su parte, el hijo de Natalia Sánchez fue asaltado el miércoles pasado, a las 17.30, en Ituzaingó entre Tucumán y ruta 8, frente al shopping Pilar Point. “Los dos menores que le robaron salieron corriendo a la colectora de Panamericana, él iba con un amigo y calculan que no tenían más de 16 o 17 años”.

María Alejandra Talatnik comentó que su hijo tiene 12 años y es alumno de la Técnica 1. A él lo asaltaron a principios del ciclo lectivo: “Salía del colegio a las 19, lo corrieron y lo golpearon, le quebraron un cartílago de la pierna y le pegaron en todo el cuerpo. Los ladrones eran parte de un grupo de quince chicos, y lo atacaron cinco. Luego fueron frente al Colegio Modelo y amenazaron a una comerciante, le pegaron a un alumno de esa escuela y a otro del Almafuerte”.

La mujer reconoció que “la escuela me acompañó muchísimo y lo cambiaron al turno mañana. Los docentes acompañan a los alumnos hasta la esquina, miran y si hay grupos raros llaman a la policía, se están ocupando mucho del tema”.

 

 

Celulares  

Los botines más buscados por los ladrones son los teléfonos celulares. Sobre esto, las mujeres indicaron que los alumnos no dejarán de llevarlos en sus bolsillos o mochilas: “Es el único contacto que tenemos con nuestros hijos, ya que la mayoría de nosotras trabajamos. Las compañías no deberían habilitar cualquier aparato sin la boleta de compra, y los chips no deberían venderse como si nada”.

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