Ahora es el ombudsman Bargaglio quien se suma al reclamo por Telefónica.
La decisión de la empresa Telefónica de reducir al mínimo la cantidad de oficinas de cobro y atención al público tuvo su coletazo en Pilar a principios del mes pasado. En la actualidad, los usuarios continúan padeciendo los efectos de la medida: en la Defensoría del Pueblo se recibieron más de 80 reclamos.
El objetivo de la institución es el mismo que ya han encarado otros actores sociales, como el concejal oficialista Walter Roldán: lograr que Telefónica vuelva a habilitar su oficina de Víctor Vergani e Independencia, cerrada para el cobro y consultas de facturación desde el pasado 7 de octubre, de manera imprevista. Además, de persistir esta situación, en la Defensoría acudirán a la Comisión Nacional de Comunicaciones, ente de control de las telefónicas.
Lo cierto es que, para el ombudsman local, Orlando Bargaglio, la situación no es muy distinta a la de los usuarios comunes: “Hay que manejarse siempre por mail, ya que no podemos hacerlo por carta o personalmente. Además, llamamos y no atienden”, afirmó a El Diario. “Hoy (ayer) mandé tres mails por reclamos, esperando respuesta. Quieren que todo se haga vía Internet o por teléfono, para manejarse con el 112. Siempre nos tratamos de comunicar, pero por mail. Sólo una vez nos atendió una gerente en Capital”, agregó.
El cierre paulatino de las oficinas –no sólo de Telefónica, sino también de Telecom- corresponde a una política de reducción de costos, ya que en el distrito la presencia del local no era considerada “rentable” por quienes manejan la central.
Sobre esto, Bargaglio reconoció que “ya quedan pocos lugares, lo más cercano a Pilar debe ser Martínez o Vicente López, si es que están funcionando... En el Partido ya no atendían personalmente, sólo cobraban, pero ahora ni siquiera eso”.
Los más de 80 reclamos que llegaron a la Defensoría corresponden a diversas cuestiones, como problemas de facturación que la gente ya no puede resolver en forma personal o enviando cartas documento. “Algunos pudimos subsanarlos porque nos contestaron, pero no la mayoría”, indicó Bargaglio, agregando que “si no se abona en un ‘pago fácil’ o un banco no se puede hacer, y si el consumidor considera que tiene que hacer algún reclamo o consulta por la factura, o corte de servicio, sólo puede hacerlo por teléfono o Internet”.
Entre los casos hay problemas de todo tipo, como el problema de un vecino de Villa Rosa al que le llegó una deuda de más de 4 mil pesos desde 1997, a pesar de que asegura haber dado de baja esa línea hace años.
A nivel local, el mencionado Roldán realizó una presentación en la Defensoría del Consumidor. A su vez, Bargaglio indicó que “una decena de Defensorías ya intimaron a Telecom, y desde Defensa del Consumidor se hizo lo mismo con Telefónica, para que vuelva a habilitar oficinas de cobro y atención al público”.
Fallo judicial
Según datos de la Federación Nacional de Trabajadores Telefónicos, en los últimos cinco años dejaron de atender al público casi el 60% de las oficinas del país. Con esta tendencia, las telefónicas estarían incumpliendo una orden judicial que obliga a mantener vigentes las oficinas de atención al público, garantizando el trato personalizado y la entrega de constancias de recepción de trámites y reclamos.
Dicho fallo fue dictado en mayo de este año por la jueza Susana Córdoba, del Juzgado en lo Contencioso Adminstrativo Federal Nº5. Además, también obliga a la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) a que haga cumplir la medida, no sólo para evitar más cierres, sino para que abran los locales que fueron cerrados.
