La nueva función Invertir de Cuenta DNI superó los 347 mil plazos fijos en 54 días hábiles, por un total de $706 mil millones. Tasa especial del 50% anual.
La nueva función Invertir de Cuenta DNI superó los 347 mil plazos fijos en 54 días hábiles, por un total de $706 mil millones. Tasa especial del 50% anual.
Desde su implementación, la funcionalidad "Invertir" de la Cuenta DNI del Banco Provincia (BAPRO) demostró un crecimiento sostenido y una rápida adopción entre los usuarios. En menos de dos meses hábiles se constituyeron más de 347.000 plazos fijos, que suman $706.000 millones, lo que equivale a 6.200 operaciones por día, o una cada nueve segundos.
Un dato clave que refleja el impacto del flamante instrumento es que ya uno de cada tres plazos fijos del BAPRO se concreta desde la app, que permite operar de lunes a viernes entre las 6 y las 21.
El plazo fijo Cuenta DNI ofrece una tasa especial del 50% anual, convirtiéndose en una de las opciones más atractivas del mercado financiero. De esta manera, la entidad pública bonaerense busca fomentar el ahorro y brindar a sus más de 10 millones de clientes una alternativa simple, segura y con alto rendimiento.
El acceso a esta función se encuentra en la pantalla principal de la aplicación, en el botón "Invertir". El proceso es rápido e intuitivo: el usuario selecciona el monto y el plazo —30, 60 o 90 días— y confirma la operación. El mismo no cuenta con renovación automática, lo que permite una gestión más flexible del ahorro.
Si bien el monto promedio de inversión superó los $2 millones, cualquier persona puede comenzar a invertir desde $1.000. Incluso jóvenes desde los 13 años pueden constituir plazos fijos, reforzando el compromiso del BAPRO con la educación financiera y la inclusión digital.
Nacida durante la pandemia como una herramienta de bancarización, Cuenta DNI se transformó en una app integral que permite pagar servicios, enviar dinero, acceder a descuentos y gestionar préstamos. La incorporación de la posibilidad de hacer plazos fijos consolida su papel como política pública de inclusión, acercando el mundo de las inversiones a sectores históricamente excluidos del sistema financiero.