Recalculando. La palabra que redescubrieron los GPS resuena en el aire de Salta. La estadía forzada en el norte, a la espera del resto del equipo, se aprovecha con una autopsia. Roberto Naivirt y Ricardo Bonazzola meten mano, desarman la Toyota Hilux para dar con el epicentro de la falla. Trasladado al fútbol, es como imaginar a Rodrigo Palacio analizando el mano a mano con Neuer en la final de Brasil 2014.
El piloto de Del Viso y su navegante abandonaron en la 4ª Etapa del Rally Dakar “Argentina-Bolivia”. Antes del regreso, realizan un estudio minucioso de la camioneta que, estiman, reducirá el margen de error para la próxima edición. Naivirt se toma unos minutos para hablar con El Diario. Del análisis y la planificación, se desprende una certeza innegable: este abandono marcó el final de un ciclo. Si hay Dakar en 2017, el Panadero lo afrontaría con otro vehículo y con un proyecto más ambicioso, acorde al híper profesionalismo que hoy rodea a la carrera más desafiante del planeta.
-¿Cuánto dura la bronca por el abandono?
- La bronca va a durar para siempre. Cada vez que te quedás en un Dakar, cuesta mucho dejar atrás la bronca. Es hasta el día de hoy que pienso en el abandono de 2011 (año del debut), es algo que no se va de la cabeza, hasta que uno empieza a aceptarlo y convivir con esos resultados. Hay que aprender de los errores, hacer una autocrítica y ver en qué fallamos.
-¿Detectaron cuál fue el problema?
- Sabemos que fue algo eléctrico que se quemó, lo detectamos bastante rápido. Pero tenemos que averiguar por qué se rompió. Vamos a aprovechar que estamos en Salta para trabajar un poco en la camioneta y ver por qué fue.
-¿Venía siendo una carrera atípica?
- Sí, fue un rally bastante atípico. No era fácil, pero el Dakar es así. Todas las carreras son distintas y esta fue particular por las suspensiones y las lluvias. Se había puesto muy complicada desde lo climático.
-¿Habrá revancha en 2017?
- Las ganas siempre están. Este fue el final de una etapa, de eso estamos convencidos. Hay que replantearse un montón de cosas porque el presupuesto que tenemos no alcanza para participar en un Dakar con los costos que se están manejando hoy. Este vehículo está muy cansado para correr, así que hay que armar uno nuevo, si contamos con el presupuesto. En febrero empezaremos a conversar con sponsors para ver cómo seguimos.
-¿Qué sensación dejó el paso por Del Viso y la manifestación del público?
- Eso es lo que más bronca me da, no haber podido cumplir con las expectativas de la gente. Recibimos muchísimo apoyo de la gente de Del Viso, Pilar, Capilla del Señor, Robles, Manuel Alberti. Tuvimos un aliento increíble en la ruta y a través de las redes sociales, algo que nunca había pasado, y habernos quedado tan cerca es lo que más me choca. Dejamos todo, pero siento que le fallamos a la gente que confió en nosotros.
-¿Qué aprendizaje dejó esta edición?
- Que la única forma de revertir esto es trabajando para lograr el apoyo económico que se necesita para encarar una carrera de este tipo. De otra forma es imposible. Ya tenemos la base de un proyecto para 2017, pero recién estamos en proceso de formación y todavía tenemos que sentarnos con los patrocinadores. Esperamos poder concretarlo y tener revancha en 2017.
“Recibimos mucho apoyo de la gente y siento que le fallamos, eso es lo que más bronca me da.”
Roberto Naivirt, piloto Del Viso Dakar Team.
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fueron las participaciones de Naivirt en el Dakar. Representó a Del Viso ininterrumpidamente desde 2011 y en 2014 logró el objetivo de completar el recorrido.