El esqueleto de hormigón que fue emblema de abandono durante veinte años en el kilómetro 49,5 del ramal Pilar de la Panamericana, finalmente verá la luz en 2025, cuando se convierta en un complejo de oficinas y locales comerciales.
El edificio de Austral Construcciones, en el Km 49,5 de Panamericana se empezó a construir en 2005. Pero fue abandonado. Una historia vinculada a la política.
El esqueleto de hormigón que fue emblema de abandono durante veinte años en el kilómetro 49,5 del ramal Pilar de la Panamericana, finalmente verá la luz en 2025, cuando se convierta en un complejo de oficinas y locales comerciales.
El “elefante blanco” que perteneció a Austral Construcciones, del empresario K Lázro Báez, parece estar despertando, finalmente, de su largo sueño atado a la zigzagueante historia política de las últimas décadas.
Ubicado frente al hotel Sheraton, en uno de los lugares más codiciados por el mercado inmobiliario, en los últimos días volvió a mostrar cartel de obra y de oferta.
El complejo se llamará Abasto Pilar y las oficinas y locales ya están siendo ofrecidos en alquiler por la inmobiliaria Blanco Propiedades, una de las más importantes de la zona norte.
Los inmuebles se ofrecen por valores que van de 3.300 a más de 7 mil dórales por mes, de acuerdo al tamaño y las comodidades, un precio alto incluso para Pilar.
En todos los casos, prometen entregarlos en marzo de 2025, aunque por el momento la transformación el esqueleto de cemento en un complejo de lujo es más bien lenta.
En la página web de Blanco propiedades se detalla que el nuevo complejo está “ubicado en la bajada del Hotel Sheraton en km 49,5 Panamericana Pilar” y que “ofrece locales y oficinas en alquiler en el mejor km de Pilar”.
Lo describe como “un edificio moderno con gran exposición”, que “ofrece locales amplios que incluyen terrazas externas en el frente y espacios interiores en la galería del edificio con acceso a las oficinas”.
“Los locales van desde 84 m2 cubiertos más 91 m2 de terrazas y 37 m2 de galería interior, hasta 214 m2 cubiertos más 208 m2 de terrazas y 108 m2 de galería interior”, señala la inmobiliaria.
En tanto, informa que las oficinas “terminadas se encuentran en los pisos superiores, equipadas con Aire Acondicionado (no amobladas), que van desde 80 m2 hasta 200 m2. Cuentan con baño y kitchenette”.
A la vez, el complejo cuneta con un rooftop techado y una terraza abierta que, de acuerdo con la oferta, se incorporan como una extensión al local destinado a gastronomía en planta baja, lo que ayudará a sumar oferta del rubro en la zona.
Cuenta, además, con 150 cocheras distribuidas en dos subsuelos, que “permiten estacionar cómodamente y acceder por ascensor a los pisos principales”.
El edificio de cuatro pisos que se levanta en una ochava entre las calles Valentín Gómez y Los Almendros, sobre la colectora del kilómetro 49,500 de Panamericana, comenzó a construirse en el año 2005 a través de un particular.
Pero, cuando el proyecto apenas despuntaba, su dueño original resolvió una venta que se definió de manera muy rápida. Desde entonces quedó abandonado en manos de la firma Austral Construcciones, de Lázaro Báez.
En medio de las causas penales que se iniciaron contra el empresario a partir de 2016, la constructora entró en cesación de pagos hasta que, a mediados de 2018, la jueza Gigy Traynor dictaminó su quiebra.
En ese marco, la magistrada ordenó un conjunto de remates de bienes muebles e inmuebles para pagar las deudas, de las cuales la principal era con la Afip, a la que Austral le debía más de 2.200 millones de pesos.
El remate del edificio de la Pilar iba a realizarse a mediados de 2021 (con una base de 2,9 millones de dólares, según se informó en su momento), pero fue postergado por la segunda ola de Covid-19.
Finalmente se remató el 4 de julio de 2022, en la cuarta oportunidad en la que salió a subasta pública. La base para las ofertas fue de 372 millones de pesos.