La expresidenta homenajeó a la resistencia peronista, a 69 de los fusilamientos. Habló del atentado en su contra y la posibilidad de ir presa. Todos los sectores estuvieron presentes.
UNIDAD. Cristina Kirchner llamó a no caer en las falsas antinomias.
La ex presidenta Cristina Kirchner encabezó este lunes un acto en el Partido Justicialista junto a dirigentes, intendentes, sindicalistas, artistas, diputados y senadores, en el marco del Día de la Resistencia Peronista y la conmemoración de los 69 años de los fusilamientos de José León Suárez.
Fue una foto de unidad en horas definitorias, cuando se espera que la Corte Suprema dé a conocer de un momento a otro un fallo que podría llevarla a la cárcel en el marco de la causa Vialidad.
“Posiblemente algunos crean que pueden derrotarnos o humillarnos. Pero hay momentos en la historia que cuando algunos personajes caminan por las calles libres, estar presa es un certificado de dignidad. Lo siento de esa manera”, dijo.
En la primera fila estuvo el gobernador bonaerense Axel Kicillof, cuya presencia estaba en duda a raíz de la interna que lo enfrenta al sector de la expresidenta. El intendente de Pilar, Federico Achával, fue parte del auditorio.
“Ya no son necesarios los golpes de Estado, no necesitan a los militantes, ahora usan al partido judicial”, dijo Cristina sobre su situación. Y aseguró que “bastó que hace una semana anunciáramos una candidatura para que se desataran los demonios”.
La expresidenta interpretó que su situación tiene que ver con que “este modelo tiene fecha de vencimiento, lo sabemos porque es una copia de lo que hizo Martínez de Hoz y la convertibilidad de los 90”.
“Este gobierno cachivache a fracasar y quieren que cuando pase no haya nada organizado y que puedan digitar el reemplazo que no ponga en peligro sus ingentes ganancias”, dijo.
Por eso, aseguró que “es importante organizarnos y no vernos como militantes electorales sino políticos”, al tiempo que manifestó que “el rol de cada compañero es de una inmensa responsabilidad. Organizar y permitir una estrategia de construcción, con desprendimiento personal. Unidad siempre y cuando el primero sea yo no sirve”, lanzó.
Y en el marco de la fecha, se refirió al atentado que sufrió en la puerta de su casa: “Yo soy una fusilada que vive. Y no me va alcanzar la vida para agradecerle a Dios esto de estar viva”.
“La casualidad no es una categoría política e histórica, y los hechos de hoy no hacen más que confirmar esta idea”, dijo. Y pidió que “no sigan dividiendo inútilmente a los argentinos” porque esas fracturas, dijo, “aún a quien se siente antiperonista o anti kirchnerista, termina perjudicándolo con procesos económicos que destruyen el presente y futuro” de los habitantes.