El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, dijo que el presidente Javier Milei busca extorsionar a las provincias y aseguró que se pondrá “frente a la defensa del pueblo”, luego de que la Legislatura bonaerense no le aprobara el presupuesto para el 2025.
“Yo no voy a permitir que quiebren a la provincia de Buenos Aires. La lógica y mecánica de Milei es atacar a las provincias y después pedirles que firmen (acuerdos) y acompañen”, expresó Kicillof en declaraciones radiales.
En esa línea, apuntó contra Milei: “"Yo no voy a entrar en ningún proceso de extorsión y me voy poner al frente de la defensa del pueblo de la provincia. Milei tiene como propósito y objetivo, principalmente ahora en el año electoral más agudo, fundir a todas las provincias”.
Kicillof calificó como “un golpe de la oposición” el rechazo a los proyectos de Presupuesto y Ley Impositiva que no fueron aprobados en la Legislatura, y advirtió que por esa circunstancia se ve obligado a “reprogramar” de “urgencia” la planificación de la gestión para el 2025.
En un comunicado emitido luego de que fracasara por segunda vez el intento de dar aprobación a ambos proyectos en la Legislatura, que ni siquiera llegó a sesionar para tratar ambas iniciativas, Kicillof hizo un resumen de las negociaciones que se desarrollaron entre la semana pasada y esta para tratar de lograr un acuerdo y atribuyó a la oposición no haberlo alcanzado.
En ese sentido, por un lado resaltó que en el lapso entre una sesión y otra “el Ejecutivo estuvo a disposición y en diálogo permanente con todos los sectores de la oposición para acordar el articulado a aprobarse”; y por el otro apuntó a las exigencias de esos sectores acerca del alcance de un monto para los municipios y de cargos en organismos constitucionales.
Requerimientos
“La oposición presentó un nuevo requerimiento para la aprobación del endeudamiento: una proporción del 16,4% de la deuda que finalmente se contrajera debía distribuirse entre los municipios, a lo que el Ejecutivo propuso que sea del 10%. De este modo se distribuirían más de $250 mil millones. Sin embargo, luego de una larga negociación, la oposición planteó una serie de nuevas condiciones que excedían todos los pedidos anteriores”, se argumenta en el comunicado.
Kicillof reafirmó que no aceptaba la aprobación de los proyectos sin que se dé el ok a la autorización de endeudamiento, un ítem que requiere la aprobación de los dos tercios de ambas cámaras y en el que se apoyó la oposición para endurecer su negativa. “Sin recursos aprobados, no tiene sentido validar un plan de gastos”, indicó en el comunicado.