La Policía Local, que funciona en Pilar desde mediados de 2015, está atravesando sus últimos días. Tras un lento proceso de desguace, que había empezado hace poco más de un año, en las próximas semanas se fusionará definitivamente con la bonaerense.
La Policía Local, que funciona en Pilar desde mediados de 2015, está atravesando sus últimos días. Tras un lento proceso de desguace, que había empezado hace poco más de un año, en las próximas semanas se fusionará definitivamente con la bonaerense.
Voceros del área de seguridad municipal adelantaron que el intendente Nicolás Ducoté ya tiene a la firma el convenio con el Ministerio de Seguridad de la Provincia que será certificado de defunción de la fuerza de cercanía.
De ese modo, Pilar se sumará a los municipios de Berisso y Necochea, los primeros en sellar el final de la Local, junto a otras comunas más chicas del interior provincial. En los próximos días, además de Pilar, seguirá el municipio de General Rodríguez, gobernado por el macrista Walter Kubar.
Lo que todavía no fue informado es cómo será el proceso de traspaso y cuál será el destino de los cerca de 500 efectivos que revistan actualmente en la fuerza.
Una de las posibilidades en danza es que sean repartidos entre las comisarías de todo el distrito, aunque por ahora no está definido.
El proceso había comenzado en marzo del año pasado, con el anuncio del cierre de las academias de la Policía Local, incluida la de Pilar.
En ese momento, Ducoté aún anunciaba que buscaría evitar la desaparición de la fuerza. Y hasta había anunciado que mantendría diálogos con su par de Lomas de Zamora, el peronista Martín Insaurralde, quien se convirtió en un abanderado de otro pedido que ya no podrá ser: el traspaso del control de las policías locales a los intendentes.
Ahora, Ducoté será uno de los primeros en firmar el final de la fuerza.