Marcela Campagnoli es la única pilarense que tendrá voz y voto en un debate que atraviesa la Argentina: el de la legalización del aborto.
Diputada nacional por la Coalición Cívica dentro de Cambiemos -una Lilita de paladar negro-, Campagnoli militó desde el principio la postura en contra de la iniciativa.
Sin embargo, ayer, en una entrevista con una radio local, la legisladora evitó los argumentos religiosos o dogmáticos y se inclinó por los sanitarios.
Incluso, sorprendió: “Si hubiera sido solo descriminalizar a la mujer, lo hubiera votado. A nadie le interesa que la mujer vaya presa por esto, que es un momento de desesperación”.
Pero afirmó que “este proyecto no soluciona lo que dice que va a solucionar; las mujeres se van a seguir muriendo, porque los argentinos no tenemos un acceso igualitario a la salud”, dijo, y aseguró que la ley en debate no garantiza ese acceso.
“La salud es universal, ¿pero sinceramente pensás que todas las mujeres tienen el acceso igualitario?”, preguntó. Y buscó un ejemplo: “Si te tomas un misoprostol -una droga que induce el aborto-, tenés que hacerte una ecografía para garantizar que no queden restos de placenta. ¿Te parece que todas las mujeres tienen acceso a tener un ecografista cerca?”, insistió.
Para Campagnoli, “hay que legislar de manera racional. No se pueden prometer cosas que no se van a poder cumplir desde el primer día. Esta ley no garantiza la vida de las mujeres”.
En ese sentido, apuntó a la prevención. Y aseguró que cuando fue secretaria de Educación de Pilar durante los dos primeros años del actual gobierno, se redujo el embarazo no deseado entre adolescentes merced a una campaña de talleres voluntarios de educación sexual.
“Nadie duda que el aborto existe, pero tenemos que tratar que sea la menor cantidad posible, porque genera un daño físico y psicológico”, opinó.