El tablero de control del Municipio encendió luces amarillas en un panel crítico: el que mide el nivel de la recaudación de tasas municipales y permite proyectar el flujo de ingresos para todo el año.
Según indicó el propio intendente Nicolás Ducoté, los ingresos registrados en los dos primeros meses del 2018, “no estuvieron a altura de las expectativas”.
“El presupuesto aumenta de un año al otro entre un 20% y un 30% y nuestra proyección es que enero y febrero son meses fuertes, en los que el crecimiento interanual está por encima del promedio y después en el resto del año baja un poco. Pero eso no sucedió del todo”, señaló Ducoté.
Aunque no dio detalles sobre los números que encendieron las alarmas, el jefe comunal contó que “cuando pasó en enero, pensamos que alguna gente se había demorado por vacaciones, pero cuando pasó en febrero de nuevo, dijimos ‘miremos a ver qué pasa’”.
Esa mirada comenzó a posarse en las cuentas esta semana, en una reunión que Ducoté mantuvo con el subsecretario de Ingresos, Juan Carlos Mairano. La semana que viene volverá a repetirse, pero esta vez el intendente espera obtener algunas respuestas adicionales.
“Vamos a analizar más en detalle cuál es el rubro donde no crecimos lo que pensábamos”, dijo. Y aventuró que “tal vez, la gente está distribuyendo más los pagos a lo largo del año” en lugar de adelantar los montos anuales en enero y febrero, como solía acostumbrar.
Aunque elogió los resultados del trabajo que viene realizando el área de Mairano, dijo que deberá buscar alternativas para mitigar el impacto. Por ejemplo, “mejorar los incentivos y la fiscalización”. Pero para eso, primero deberá conocer quiénes y por qué no están aportando como él esperaba.