Internaron en el Austral al hijo de la presidenta Cristina Fernández

Máximo Kirchner sufre artritis séptica. Debió ser intervenido y desde ayer permanece hospitalizado. Agrupaciones K dejaron sus muestras de apoyo para el dirigente de La Cámpora.

12 de junio de 2012 - 00:00

El Hospital Austral de Pilar, radicado en la localidad de Presidente Derqui, volvió a quedar ayer en el foco de la prensa de actualidad política nacional. Es que allí se encuentra internado Máximo Kirchner, el hijo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien a su vez había sido intervenida en el enero pasado en el mismo centro asistencial.

Máximo Kirchner padece de un cuadro de artritis séptica en la rodilla derecha, según informaron la Unidad Médica Presidencial y autoridades de esa institución médica.

Un parte médico difundido ayer por la tarde informó que “se le efectuó un lavado articular artroscópico en quirófano para resolver una infección, con resultado exitoso” y agregó que “el paciente se encuentra estable y de buen ánimo”.

El dirigente de La Cámpora, de 36 años, fue trasladado de urgencia desde Río Gallegos en el avión presidencial hasta el Austral, adonde ingresó a las 5.30 ayer.

Desde ese momento, se desplegó un amplio operativo de seguridad, al que estuvieron afectados 30 agentes de la policía local, con el propio jefe distrital, Jorge Aguilar, a cargo.

También participaron tres móviles del Servicio de Apoyo Policial (SAP) de la Municipalidad de Pilar, ubicados en las calles aledañas.

De todos modos, a diferencia de la internación de la Presidenta en el mismo lugar, en enero pasado, la movilización de los militantes fue más bien escasa. Desde temprano, la reja del Austral mostró algunas banderas de la agrupación Kolina, que comanda la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, tía del paciente.

También hubo representantes de agrupaciones que responden al exintendente de José C. Paz, Mario Ishii que, como en enero, consiguieron las mejores ubicaciones.

Aunque esta vez el tránsito no debió ser cortado, sí se registraron algunas restricciones en el ingreso al centro asistencial, donde los guardias de seguridad mostraron más celo que de costumbre.

Algunas quejas quedaron registradas entre los seguidores de El Diario en Facebook. Como la de Rocio Gozeta, que opinó: “Otra vez una odisea ir al Austral, cada vez que los K viene es un caos irse a atender. ¿Por qué no van a otro lugar? Insoportables.

 

Parte médico

 

El parte médico difundido ayer por el Austral lleva las firmas de los médicos Luis Buonomo (Unidad Médica Presidencial); Eduardo Schnitzler (Director Médico - HUA); Carlos Autorino, Dr. Horacio Rivarola Etcheto (Servicio de Ortopedia y Traumatología HUA). 

Según señala, “un estudio del líquido sinovial de la rodilla corroboró el diagnóstico” de artritis séptica para Máximo Kirchner. Agrega que, “días atrás había padecido molestias abdominales producto de un cuadro de diverticulitis”.

“Como tratamiento se le efectuó un lavado articular artroscópico en quirófano, para resolver la infección con resultado exitoso”, continúa y agrega que “El paciente se encuentra estable y de buen ánimo”.

Según se supo a lo largo del día, Máximo venía soportando una gripe fuerte en los últimos días que estaba pasando en Santa Cruz. Por eso, se había culpado a los medicamentos tomados para curarlo por el malestar gástrico que sufría.

Por ese cuadro, el viernes debió hacerse estudios y el domingo, en una resonancia magnética, se detectó además la artitris.

La presidenta Cristina Fernández lo acompañó ayer en el viaje y permaneció con él buena parte del día en el Austral, adonde llegó más tarde, en helicóptero. Ese es uno de los motivos por el que el Austral es elegido para la atención de la presidenta y su familia: es el único de la zona que cuenta con helipuerto propio.

Por la enfermedad de su hijo mayor, la Presidenta decidió suspender un acto en Haedo, donde tenía previsto inaugurar una fábrica de electrodomésticos.

 

Austral

El hospital presidencial 

El Hospital Universitario Austral (HUA) sumó, este año, un título más a los que ya tenía: el de ser el lugar elegido por la presidenta Cristina Fernández y su familia para atender su salud ante casos que requieran internaciones.

El 3 de enero pasado, la Presidenta llegó para ser operada un carcinoma papilar en el lóbulo derecho de la glándula tiroides que, tras los análisis patológicos, resultó ser benigno.

En aquella oportunidad, en el frente del hospital, sobre las veredas, acamparon militantes de distintas agrupaciones y movimientos sociales, que llevaron banderas, pancartas y pasacalles en apoyo a la Presidenta.

A diferencia de lo que ocurrió ayer, con la llegada de Máximo Kirchner, esa vez se restringió el tránsito por la ruta 234, lo que generó quejas de los vecinos de la zona, que debieron desviarse para ir a trabajar y volver a sus casas durante los días que duró la internación.

 

Seguí leyendo

Dejá tu comentario

Te Puede Interesar