Pese al ACV, los médicos dicen que Patti podrá asistir a las audiencias.
El ex subcomisario bonaerense y ex intendente de Escobar Luis Abelardo Patti, se sentará desde mañana en el banquillo de los acusados para afrontar el primer juicio oral por delitos de lesa humanidad en su contra, acusado por una decena de secuestros y asesinatos cometidos en jurisdicción de la comisaría de ese partido durante la última dictadura militar.
El juicio comenzará a las 9.30 en el auditorio “Hugo del Carril” de la localidad bonaerense de José León Suárez, al cual Patti será trasladado todos los lunes y jueves -días de audiencia- desde la clínica Fleni de Escobar, donde está internado recuperándose de un accidente cerebro vascular sufrido tras una operación.
Según informaron a Télam fuentes del Tribunal Oral Federal 1 de San Martín, el último informe médico recibido dictaminó que el ex comisario está en condiciones “psíquicas y físicas” de asistir al juicio oral, en el que será defendido por el ex camarista de Casación Penal Alfredo Bisordi, quien renunció para jubilarse, en medio de denuncias en su contra por supuestas dilaciones en las causas por delitos de lesa humanidad que tramitaba el máximo tribunal criminal del país.
Junto a Patti se sentarán en el banquillo; el último presidente de facto Reynaldo Bignone, el ex general Santiago Omar Riveros, Eduardo Alfredo Espósito y el ex titular de la comisaria de Escobar cuando Patti trabajó allí en la dictadura, Juan Fernando Meneghini.
Entre los testigos considerados fundamentales por los querellantes están el hijo de una de las víctimas, quien recientemente recuperó su identidad, Manuel Goncalves, dos sobrevivientes, el secretario de Derechos Humanos de la Nación Eduardo Luis Duhalde y una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo Maria “Chicha” Chorobik de Mariani.
Los jueces del tribunal oral serán Lucila Larrandart, Marta Milloc y Héctor Sagretti.
La audiencia del mañana comenzará con la lectura del requerimiento de elevación a juicio fiscal, donde se acusó a Patti de integrar el aparato represivo de la última dictadura. Luego se preguntará a los detenidos si desean prestar declaración indagatoria, como paso previo al comienzo del desfile de testigos: más de un centenar en un juicio que se calcula, se extenderá como mínimo dos meses.
Casos
El primer caso en abordarse será el de Gastón Roberto Gonçalves, un joven militante de la organización Montoneros que fue secuestrado el día del golpe de Estado, 24 de marzo de 1976, se cree que en la ciudad de Zárate o en la estación de trenes de Escobar por un grupo armado. De la investigación se supo que fue visto el 29 de marzo en un camión celular estacionado detrás de la comisaría de Escobar, donde alcanzó a contar a otros secuestrados que había sufrido torturas.
El 30 de marzo el camión se fue de la seccional y nunca se supo con certeza adonde fue llevado. El 2 de abril fueron hallados cuatro cuerpos quemados con el cráneo destruido por disparo de arma de fuego, entre neumáticos encendidos. Recién en 1996, el Equipo Argentino de Antropología Forense lo identificó entre esos cadáveres, enterrados como NN en Escobar.
El segundo caso a tratar por el Tribunal será el del ex diputado nacional Diego Muñiz Barreto y su secretario Juan José Fernández, ambos secuestrados el 16 de febrero de 1977 por el entonces oficial de policía Patti en Escobar.
También fueron llevados a la comisaría de esa localidad y estuvieron hasta el 18 de febrero, cuando se los derivó a la Unidad Regional de Tigre, donde estuvieron dos horas esposados y desvestidos hasta que los subieron a dos autos Ford y encapuchados los trasladaron a Campo de Mayo.
De allí, los llevaron a otros centros clandestinos hasta que finalmente se los introdujo en el baul de un auto y los llevaron a Entre Ríos.
En una de las paradas, les suministraron inyecciones con un líquido blanco turbio para adormecerlos y tras colocarlos en un auto de Fernández, los empujaron a un río cerca de Villaguay.
El auto quedó sumergido y fue encontrado volcado con el cadáver de Muñiz Barreto en su interior.
Todo se reconstruyó en base al relato de Fernández, quien escapó del auto y logró sobrevivir. El episodio se presentó como un falso accidente de tránsito.
El tercer caso será el ocurrido con Carlos Daniel Souto, Guillermo David D’Amico, Luis Rodolfo D’Amico y Osvaldo Tomás Ariosti.
Los hermanos D’Amico están desaparecidos desde el 10 de agosto de 1976, cuando se los llevaron de su casa en Escobar.
En la causa se estableció que se trató de un grupo de tareas compuesto por policías y militares que ese mismo día secuestró a Carlos Souto, también desaparecido. Además, en Escobar fue secuestrado Osvaldo Ariosti la madrugada del 3 de abril de 1976, en su casa y por un grupo policial.
Tras distintos traslados y ser sometido a torturas fue liberado el 28 de octubre de 1978 y luego falleció.
La acusación
Una causa que se reabre
La causa contra Luis Patti estuvo cerrada hasta hace cinco años, cuando se reabrió bajo impulso del fiscal federal de San Nicolás Juan Murray, quien también actuará como acusador en el juicio oral.
Murray pidió y obtuvo la nulidad de un sobreseimiento dictado a favor de Patti en 1986 al agregar nuevos elementos que reabrieron la investigación, como documentos de la Dirección de Inteligencia de la Provincia de Buenos Aires y de la Embajada de Estados Unidos.
Y lo acusó de integrar un «aparato de poder» como parte de la dictadura que cometió los secuestros y asesinatos, al dar por probada su participación en los hechos.
En el juicio oral intervendrán los abogados querellantes por familiares de las víctimas, Ana Oberlin y Pablo Llonto en representación de los hijos del diputado Muñiz Barreto, Juana, Diego, Antonio y de Gastón y Manuel Gonçalves y Marisa D’Amico.
También, lo harán los abogados Alejo Ramos Padilla y Antares Dudiuk por la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, además de actuar como querellante la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación. Por la fiscalía la acusacion estará a cargo de Marcelo García Berro, Javier De Luca y Murray.