Un hecho poco frecuente tuvo lugar en las últimas horas en la localidad de Garín, donde un joven fue detenido tras apedrear la sede del Subcomando de Patrullas. Al aprehenderlo, se descubrió que era la misma persona que había sido dada de alta recientemente por haber sufrido una dura golpiza por parte de dos policías.
El episodio sucedió en la tarde de este jueves. Según El Día de Escobar, dos sujetos atacaron a piedrazos las ventanas del Subcomando de Patrullas, lanzando gritos y amenazas. Luego, fue detenido uno de ellos.
Por el ataque, de inmediato arribaron al lugar personal del Grupo de Prevención Motorizado (GPM) y del Comando de Patrullas Escobar. Los efectivos policiales iniciaron la búsqueda de los atacantes, llegando hasta un domicilio ubicado en la calle San Martín al 4100, a apenas dos cuadras del edificio vandalizado. Allí se detuvo a uno de los agresores, quien en los bolsillos de su campera tenía dos municiones -una de 9 y otra de 22milímetros- y un cuchillo de acero inoxidable, de unos 20 centímetros.
Al identificar al aprehendido, el personal policial se llevó una sorpresa: se trataba de Dylan Gabriel Talaban, el joven de 22 años que el martes a la madrugada había sido objeto de una feroz golpiza por parte de dos agentes de la comisaría Escobar 3ra, que fueron detenidos. La víctima había sido llevada de urgencia a la UDP de Garín, donde ingresó presuntamente en grave estado. Incluso, debido a la complejidad de su cuadro, más tarde lo trasladaron al Hospital Provincial Enrique Erill.
Pero lo cierto es que Talaban se recuperó en tiempo récord, por lo que fue dado de alta mucho antes de lo que se suponía en un principio. Una vez fuera del hospital, decidió tomar venganza apedreando la sede policial. Fuentes policiales afirmaron al medio escobarense que se trata de un sujeto con antecedentes por robo y otros hechos delictivos, al igual que varios de sus familiares.