La víctima (izq.) y el único detenido hasta el momento.
En las últimas horas cayó uno de los sospechosos de haber baleado a un nene de 13 años en el Partido de Malvinas Argentinas, luego de haber sido identificado por las cámaras de seguridad del municipio vecino. A su vez, a través de un lector de patentes, se pudo hallar la moto utilizada en el violento robo. Mientras tanto, su cómplice continúa prófugo.
Voceros judiciales informaron que un adolescente de 13 años se encontraba en el lugar, cuando fue interceptado por dos motochorros armados que le exigieron la entrega de su teléfono celular.
En esas circunstancias, uno de los delincuentes le efectuó un disparo al menor de edad, que impactó en el abdomen de la víctima, y luego ambos huyeron del lugar a bordo de la moto.
Según trascendió, el malviviente (identificado por la Justicia como Luis Emiliano Franco, de 26 años) fue aprehendido en su domicilio ubicado en el barrio Frino, de José C. Paz, lugar al que emprendió la fuga luego de cometer una serie de ilícitos en Malvinas Argentinas. Entre ellos, el robo de una moto en la localidad de El Triángulo, vehículo con el cual cometió el posterior robo en Tierras Altas, donde el menor Dylan Ibarrola resultó herido.
Luego del hecho, las cámaras de seguridad del municipio de Malvinas Argentinas fueron claves en el caso, ya que pudo hacerse el seguimiento de los delincuentes y también reconocerse la moto a través de un lector de patentes.
Franco quedó imputado por los delitos de “homicidio criminis causa en grado de tentativa y robo agravado por el uso de arma de fuego también tentado”. El delincuente se negó a declarar ante la fiscal Marisa Marino, de la UFI N° 21 descentralizada de Malvinas Argentinas.
Grave
Este fin de semana, el papá de Dylan contó a través de las redes sociales que su hijo, quien está internado en el Hospital de Trauma, “entró en un colapso y es propenso a sufrir un paro cardíaco porque los riñones no están funcionando". Por eso, "los médicos propusieron hacer una diálisis, pero al estar tan débil le puede hacer que le agarre un paro cardíaco”.
El progenitor afirmó que Dylan “está muy complicado” y que “sigue luchando por su vida. Hoy mi hijo está en entre la vida y la muerte. Pido oración por su vida. Por favor, que Dios haga un milagro”.
