Es Alexa Souto Moyano, quien en 2022 recibió una pena de 6 años y 8 meses de prisión por secuestro y crimen del adolescente.
A 15 años del crimen, la Sala III de la Cámara Federal de Casación Penal resolvió por mayoría confirmar la condena de Alexa Souto Moyano, la última acusada del crimen de Matías Berardi, adolescente de 16 años que en 2010 fue asesinado luego de haber sido secuestrado en Panamericana y ruta 26.
Souto Moyano, que era menor de edad al momento del crimen y fue absuelta en el primer juicio (en 2013), fue condenada a seis años y ocho meses de prisión en noviembre de 2022, por decisión del Tribunal Oral Federal Nº 3 de San Martín. En el segundo debate, la Justicia la consideró coautora del delito de secuestro extorsivo agravado por el empleo de arma de fuego, por tratarse la víctima de un menor de edad y por el número de intervinientes. Desde entonces, cumple prisión domiciliaria con una tobillera electrónica.
“Fue un proceso muy largo, doloroso. Nuestros abogados hicieron un gran trabajo, nos apoyaron y la justicia nos escuchó“, dijo María Inés Daveiro, la mamá de Matías, tras conocerse el fallo, al portal Infobae.
“Siempre estuvimos seguros de la participación y la responsabilidad que tuvo Alexa. Por eso seguimos adelante. No por venganza, sino buscando la verdad y la justicia, para honrar la memoria de Matías", expresó y agregó: “Quizás son pocos los años que tiene que cumplir, pero lo importante es que la condena está firme. Tardó, pero se logró”.
Al momento de la condena, los abogados Eduardo Durañona y Santiago de Jesús, representante de la familia Berardi, habían requerido una pena de 20 años de cárcel. Por su parte, la defensora oficial Diana Bergel había pedido su absolución o que, subsidiariamente, de ser condenada Souto Moyano recibiera una pena de 3 años de prisión de ejecución condicional como coautora del secuestro, cometido cuando ella era menor de edad.
"Siento que en mi declaración ya dije lo más importante y lo que tenía para decir. Lo único que digo es que los responsables y los culpables ya tienen una condena y la están cumpliendo. Yo no tengo nada que ver", expresó Souto Moyano a la hora de pronunciar sus últimas palabras antes del fallo.
"Necesito que esto termine para mí y que sea justo", completó, sin hacer referencia a la víctima o su familia en ningún momento.