Por capricho del fixture, se cruzan este fin de semana. Por méritos propios, se enfrentan como líder y escolta del Torneo Apertura. El encuentro entre Malvinas y Atlético será el epicentro de la 14ª fecha de la Liga Escobarense. Se encontrarán a dos de los principales candidatos al título en el estadio Carlos Barraza y las expectativas son altísimas. Tanto, que desde el equipo puntero anunciaron que “se verá uno de los partidos más vibrantes y de mayor ida y vuelta que puede haber en la Liga”. “Atlético tiene una exigencia futbolística muy importante, más allá de la calidad de jugadores que tiene, y la oferta será una buena medida para ambos”, adelantó el DT de Malvinas, Alejandro Ruitiña.
En diálogo con el programa La liga Radio, el entrenador del líder opinó que el Rancho “sale a imponer su ritmo y quiere demostrar que está para salir campeón. No sale a apretar hombre a hombre ni a trabar el juego”. “Nosotros jugamos igual, así que será un partido de ida y vuelta con mucho espacio”, pronosticó Ruitiña.
Además, aseguró que el juego del sábado será especial porque le servirá como vidriera para mostrar los jugadores de Malvinas, ya que, en definitiva, ratificó que ése es el principal objetivo del club. “Nuestra prioridad es demostrar que tenemos futbolistas que pueden jugar en otro lado y estos partidos, contra los mejores equipos de la Liga, son clave para mostrarse”, anunció el entrenador, aunque no escondió su ilusión de consagrarse “Estamos más pendientes de la evolución de los jugadores que del campeonato, pero tampoco es que no nos interesa. Los chicos están muy entusiasmados con el torneo, lo siguen a través de El Diario y quieren ganarlo”, enfatizó.
Excepcional
El club Malvinas se sumó a la Escobarense en la temporada 2013 y llamó rápidamente la atención de sus rivales por su estilo de juego, por la juventud de sus jugadores, por su nivel. Llegó a cuartos en el Apertura 2013, fue 3º en el Clausura de ese año y ahora está puntero. Pero, más allá de todo, el elenco de Adolfo Sourdeaux es excepcional. No se fundó como un equipo de barrio, como el resto de los ligueros, sino que fue ideado como una usina de jugadores. “Malvinas es un sistema de juego”, explica su responsable, Ruitiña. El DT describe que su equipo no planea los esquemas dependiendo del rival ni el resultado y que trabaja por una línea de juego. “Los chicos recién empiezan a acostumbrarse a las mañas de los jugadores de Liga y recién el año que viene, si mantenemos la base, podremos sacar provecho de una formación táctica”, calcula.
En ese sentido, destacó el nivel de la Escobarense y aseguró que sus dirigidos se desarrollaron rápidamente gracias al certamen regional. “Antes teníamos niños y ahora, a pesar de tener un promedio de 17 años y tener edad de Quinta División, están en condiciones de mezclarse con un plantel de Primera”, describió y explicó que fue “gracias al trabajo que hicieron en la Liga”. “Evolucionan más rápido en la Escobarense que jugando en cualquier división juvenil de un club porque en cada partido aprenden algo”, completó.