Meisner y O’Higgins, el lugar donde ocurrió el último ataque.
Las dos últimas violaciones ocurridas en el barrio Monterrey de Presidente Derqui fueron cometidas por dos personas distintas, por lo cual no se estaría frente a un “violador serial”.
Desde la Comisaría 2ª de Derqui, se confirmó ayer a El Diario que las descripciones del violador en los dos últimos casos “no son coincidentes, no es la misma persona”. En este sentido, que no se trate del mismo victimario torna más complicada la investigación, ya que de esa manera se multiplican los blancos a seguir.
Por otra parte, las fuentes policiales consultadas se negaron a dar otra clase de información, “primero para preservar a las víctimas, que en estos casos es primordial; y por otro lado porque la fiscalía no autoriza a dar ningún tipo de información”, aunque indicaron que en la resolución de los hechos “está trabajando toda la DDI y toda la policía”.
Las dos violaciones que ocurrieron en el barrio Monterrey durante los últimos días reflotaron una problemática que alcanzó su punto máximo el año pasado y ha vuelto a golpear: en lo que va del mes se han producido cuatro ataques sexuales en el distrito. Asimismo, en Pilar, durante 2009 se produjeron 35 violaciones, un 59% más que el año anterior (con 22 casos). Además, entre junio y julio se produjeron siete hechos sólo en Presidente Derqui.
Justamente un derquino, el ex senador provincial José Molina, apoyó e insistió durante todo su mandato con la implementación de una base de datos que permita almacenar y difundir información sobre personas condenadas por violación. El nombre “oficial” del proyecto –luego transformado en Ley- es el de Registro de Condenados por Delitos contra la Integridad Sexual (conocido popularmente como Registro de Violadores), en el que figuran la identidad de los violadores y sus demás datos personales, información que es pública para todos aquellos ciudadanos que tengan un interés legítimo.
Salvaje
El último hecho sucedió en la madrugada del lunes, cuando una mujer de 35 años fue violada y golpeada salvajemente en el barrio Monterrey, el mismo escenario en el que se produjo otra vejación hace unos días atrás.
Cerca de las 6.30, la víctima circulaba por la esquina de Edison y Alfaro para ir hacia la estación de trenes. En ese momento, un hombre morocho y de pelo hasta los hombros –con abundante olor a alcohol- la abordó y amenazó de muerte con un cuchillo, para luego obligarla a caminar a su lado.
Ambos recorrieron unos 250 metros hasta llegar a una arboleda ubicada sobre calle Meisner, a escasos metros del paso a nivel cerrado de calle O’Higgins. Pero, antes de someterla sexualmente, el violador la golpeó reiteradamente en el rostro. Luego, sí, la mantuvo cautiva a su merced durante casi una hora. Antes de escapar, el atacante le robó la billetera y documentos.