Un local de venta de teléfonos celulares que fue asaltado tres veces en poco más de un mes, fue víctima de un nuevo intento de robo, en esta oportunidad, cuando estaba cerrado.
Un local de venta de teléfonos celulares que fue asaltado tres veces en poco más de un mes, fue víctima de un nuevo intento de robo, en esta oportunidad, cuando estaba cerrado.
Se trata de local ubicado en la esquina de Lorenzo López y San Martín, en una de las esquinas de la plaza 12 de Octubre. El último caso ocurrió este domingo cuando delincuentes rompieron el candado de la casa que da a los fondos del local, que está deshabitada, e intentaron ingresar por la cocina.
Para ello hicieron un boquete en la pared para ingresar al salón de ventas. Como se disparó la alarma, los ladrones optaron por escapar.
Días atrás dos delincuentes de unos 40 años ingresaron al local y sin que los clientes se percataran les pidieron a los empleados que los “atendieran como si fueran compradores” y les entregaran todos los aparatos en exhibición y los de la caja fuerte, más el dinero que se encontraba en un cajón.
En el anterior robo, ocurrido el 27 de febrero, tres delincuentes armados, cuyas edades rondaban los 40 años, asaltaron poco después del mediodía el mismo comercio de venta de celulares que ya había sido robado también a fines de enero.
En el hecho del mes anterior, los ladrones irrumpieron en el negocio, ataron con precintos a los empleados en el baño y forzaron la caja fuerte que, al parecer, sabían perfectamente dónde se encontraba. Como botín, los delincuentes se llevaron los equipos de telefonía más caros que encontraron y objetos personales de los trabajadores que se hallaban en el lugar.
Cabe recordar que el 28 de enero, el mismo local había sufrido otro asalto. Ocurrió entre las 19 y las 19.30 de aquel día, cuando entró al comercio una pareja joven. De acuerdo a lo manifestado por el personal del negocio, ambos parecían alterados por el consumo de alcohol o drogas.
Tenía 28 años
Muere electrocutado mientras manipulaba cables de TV
Un joven pilarense murió electrocutado en la tarde del domingo, mientras manipulaba unos cables de televisión en la casa de su novia. La víctima fue identificada como Mariano Marzano, de 28 años, domiciliado en el centro de Pilar.
El hecho se produjo en la localidad de Tortuguitas, en momentos en que Marzano se encontraba en la casa de su novia. En el domicilio estaban ellos dos y la abuela de la joven.
De acuerdo a lo que relataron a El Diario fuentes consultadas, cerca del horario del partido entre Boca y River, el joven se subió a un altillo para lograr conexiones que le permitieran ver el encuentro con una mejor calidad de imagen, pero al comenzar a manipular los cables recibió una descarga eléctrica, falleciendo en el acto. Cabe recordar que, a esa hora, llovía en forma copiosa, lo que puede haber sido uno de los motivos del accidente.
A su vez, trascendió que las autoridades que se acercaron luego del lamentable suceso debieron colaborar en el retiro del cuerpo del joven, que era una contextura física grande, ya que quedó atrapado en el altillo ante la vista de las dos mujeres.
Marzano trabajaba en un negocio de venta de máquinas de cortar pasto, ubicado sobre la ruta 25. Luego de la autopsia, los restos comenzaron a ser velados desde anoche en el centro de Pilar.