Las unidades tomaron las calles Gonnet y French como terminal.
Las unidades tomaron las calles Gonnet y French como terminal.
Desde hace poco más de un mes, recorre las calles de Del Viso una nueva línea de colectivos que une los barrios Los Tilos, Pinazo, Los Lagartos y el centro de la localidad, entre otras zonas. Pintados “a mano”, sin identificación y utilizando como oficina de cabecera a una esquina céntrica, estos vehículos prestan servicio a los delvisenses que no paran de quejarse.
Los vecinos apuntan que estos colectivos tienen recorrido por calles mejoradas por los frentistas y “las están destrozando, no aparece ninguna empresa que se responsabilice por la prestación del servicio, los colectivos muestran un estado muy deteriorado y despiertan desconfianza en cuanto a contar con habilitación para prestar servicio y contar con un seguro de vida”, destacan.
Además, los colectivos comenzaron a recorrer la zona sin contar con una playa de estacionamiento ni un local que oficie de cabecera o “control” del servicio, en lugar de esto, los colectivos se amontonan en la esquina de Gonnet y French y en ese mismo punto céntrico se instalaron sillas y reposeras donde varias personas dan la impresión de controlar los horarios de los colectivos al cabo de cada vuelta del recorrido.
El pintado de las unidades, la reparación mecánica y el recambio de neumáticos también se hace en esa esquina, utilizando como escenario la vereda y gran parte de las calles. No cuentan con baño, por lo tanto han decidido utilizar una vieja estación de servicio abandonada para hacer las necesidades. “Con un calentador de los que se usan en los camping calientan el agua y toman mate en la vereda”, precisa un vecino.
“La estación de servicios abandonada era una preocupación para nosotros, pero ahora el tema empeoró; con todos esos colectivos instalados, la esquina se tornó muy peligrosa, ya que cualquiera se puede esconder ahí de noche y cometer un delito; es que los colectivos están ahí todo el día”, manifestó preocupado otro vecino de la zona.
Blancos, verdes, rojos
Las pocas unidades que integran la flota que mantiene inquietos a los delvisenses están pintadas a “pincel y rodillo” de color blanco o verde y rojo; y en su frente exhiben el número de línea 521. Pero no aparece en los laterales el nombre de la empresa a la que pertenecen.
Sentados en la vereda, varios hombres hacen las veces de inspectores y controlan la normal prestación del servicio. El recorrido arranca en la estación de trenes de Del Viso y desde allí parten a Pinazo, Los Tilos y al barrio privado Los Lagartos, según consta en un cartel que se instaló a la salida del andén.
“Para funcionar, deben alquilar un predio para estacionar los colectivos y un local para poner una oficina que sea la administración” apunta un vecino que prefirió no dar a conocer su nombre. “Hemos visto a políticos y punteros de la zona charlando con los colectiveros y también con los supuestos inspectores; sin duda cuentan con respaldo del Municipio”, agregó.
Por otra parte, la empresa cubre una zona que, aparentemente, necesitaba el servicio; ya que son varios los usuarios que se suben a estos colectivos y viajan en ellos. Desde las siete de la mañana y hasta cerca de la medianoche, los colectivos circulan prestando servicio a la par de otras líneas tradicionales como la 291 o la 176.
Juntar firmas
Una idea que surgió entre los vecinos que se mostraron más preocupados por este asunto fue la de reunir firmas para pedir a las autoridades municipales que exija a la nueva línea de colectivos que tramite los permisos para poder funcionar y que alquile playa de estacionamiento y oficina de administración.
Comerciantes, vecinos y miembros de instituciones intermedias de la zona dejaron en claro a El Diario su preocupación ante esta situación que vive la comunidad delvisense.