Durante este mes, la huerta continúa con su producción veraniega y estimula las recetas con las verduras que están a pleno para compartir con familiares y amigos.
Durante este mes, la huerta continúa con su producción veraniega y estimula las recetas con las verduras que están a pleno para compartir con familiares y amigos.
Sin embargo, considerando la protección que implican las altas temperaturas, también puedes aprovechar este tiempo para iniciar el desafío cómo comenzar tu huerta orgánica, esta columna, te servirá de guía.
Crear tu propia huerta en casa es la opción más económica y simple para consumir alimentos saludables. Sólo basta contar con un pequeño espacio de tierra en tu patio, pequeños canteros donde cultivar tus alimentos, en caso de que vivas en un departamento, puedes armar almácigos con viejos recipientes en desuso o cajones de madera y crear un jardín comestible en tu balcón.
Lo importante es tener el claro qué debemos sembrar en cada estación del año y así aprovisionarnos de alimentos para la siguiente. Con unos pocos minutos por día que le dediques a cuidarla y mantenerla, tu huerta urbana crecerá sanamente y podrás disfrutar en tus platos el fruto de tu trabajo.
1/ ¿QUÉ SEMBRAR EN FEBRERO EN MI HUERTA?
La estación de otoño se acera: ¿Que puedo plantar en febrero? Te mostramos una lista de plantas para sembrar en febrero que preparan los cultivos de otoño.
La siembra que disfrutaremos durante el otoño contiene gran variedad de verduras de hojas verdes. La clorofila que abunda en ellas, es una fuente increíble de vitaminas, minerales y fibras. Es importante que en la estación previa al invierno nuestro cuerpo se nutra de estos alimentos para fortalecer nuestro sistema inmunitario y hacer frente a los fríos sin enfermarnos. Como dicen, "que tu medicina sea tu alimento". La naturaleza nos brinda de forma natural las herramientas para estar siempre sanos, crear tu huerta en casa te abrirá las puertas a una mejor salud.
Ahora sí, sin más vueltas, te enumeramos qué puedes sembrar en febrero:
HOJAS VERDES (Hojas verdes, espinaca, escarola, lechuga, acelga, achicoria, rúcula): debes sembrarlas de forma directa en tu huerta, ya sea en tierra o en recipientes. Si piensas en trasplantarlas una vez que comienzan a crecer, procura no dañar sus raíces.
CEBOLLAS, BERRO Y AJO: para sembrar ajo, entierra un diente a 3 cm y espera que comience a dar sus hojitas verdes. Para el caso de la cebolla, esta se siembre mediante semilla y debes colocarlas separadas unos 15 cm para que cada brote reciba buen sol.
REPOLLO, BRÓCOLI Y COLIFLOR: son cultivos de almácigos y su desarrollo lleva un período largo. ¡Pero vale la espera, pues son muy ricos! Una vez hecha la siembra en almácigos, debes esperar a que den como mínimo cuatro hojas para trasplantarlos a tierra. Procura dejar unos 40 cm de espacio entre planta y darle cobertura al suelo para que preserve su humedad.
HABAS Y ARVEJAS: su cultivo es el más sencillo. Se realiza en surcos, separando una planta de otra por 10 cm y las recubres con no más de 2 cm de tierra. Al momento que comienzan a desarrollarse debes asignarles un tutor para mantenerlas erguidas.
PEREJIL: Mantén las semillas en remojo, 24 horas antes de sembrarlo. Colocamos la semilla en tierra en un semillero o almácigo cuidando que la temperatura promedio sea de entre 18 y 22º. Su germinación puede oscilar entre 15 y 18 días, una vez que de algunas hojas lo trasplantamos dejando una separación de 20 cm entre planta.
REMOLACHA: su siembra es directa, preparamos los surcos en tierra de 2 cm de profundidad y separados unos 20. La temperatura ideal que debe recibir es de entre 10 y 24º, requieren de suelo húmedo, pero no de barro.
RABANITO: precisa muy poco espacio y se siembra de manera directa. Requiere mucha humedad, pero cuidado con generarle barro.
LECHUGA: su siembra es directa, debes dispersar las semillas en tierra, dejando un espacio de 10 cm entre planta y cubriéndolas con un poco de tierra o humus.
ZANAHORIA: la forma más indicada para su siembra es por voleo. Consiste en esparcir sobre la superficie de tierra las semillas procurando que queden distribuidas de la mejor manera. Repartidas las semillas, deberás cubrirlas con una capa leve de tierra y regar ligeramente. Las zanahorias precisan entre 10 a 15 cm de separación para crecer sanas, por lo tanto, deberás ir controlando su desarrollo y corregir tu siembra en caso de que quedasen amontonadas.
PUERRO: un dato importante es que este no crece en suelos compactos, deberás remover muy bien la tierra para poder sembrarlo. Una vez hecho esto, realiza surcos de entre 5 y 10 cm de profundidad separados por 15 cm.
APIO: deben sembrarse en almácigos con tierra fértil y muy húmeda y trasplantarlo a los sesenta días. Conviene evitar el exceso de sol. La distancia mínima entre planta debe ser de 20 cm., cuando los tallos alcancen un largo de 30 cm se los debe atar y cubrir con tierra. Pasados tres meses, se pueden desplantar.
2/ LA CLAVE ES COMO PREPARAR LA TIERRA DE LA HUERTA
Una tarea muy importante para obtener buenos resultados es preparar la tierra de la huerta, no sólo el suelo sino también las maceta o almácigos. Descubre qué semillas sembrar directamente al suelo y cuáles tienen que sembrarse primero en semilleros.
Los factores que resienten la tierra de un año para el otro son miles: lluvia, fríos excesivos, abundancia de riego, etc. Esto muchas veces provoca que la tierra se compacte e impida el paso no sólo del agua sino también del aire. También, si el cultivo es excesivo, la tierra pierde nutrientes y fertilidad. Por ello, las labores de acondicionamiento son esenciales.
3/ TAREAS DEL HUERTO EN FEBRERO
Ya sabemos que se puede sembrar en febrero, veamos ahora las tareas que puedes hacer durante este mes según el hemisferio en que te encuentres:
Febrero aun es un mes de mucha calor y temperaturas altas, por lo que las tareas para este mes caluroso son:
También los tomates pueden presentar signos de ataque de oídio y viruela. Al igual que en el caso anterior se deben pulverizar para prolongar las cosechas. Hay que continuar atándolos y pinzando los brotes auxiliares. Si se ven raíces en la superficie colocarse compost o tierra negra para favorecer el crecimiento.
En las hojas de acelga pueden encontrarse también la enfermedad de la viruela, que pequeñas manchas circulares causadas por un hongo fácilmente controlable. Salir por la noche con una linterna nos permitirá sacarlos a mano.
Las chauchas y los tomates son susceptibles a los ataques de arañuelas (puntitos amarillos que presenta la cara superior de la hoja). Deben controlarse inmediatamente ya que pueden destruir la planta.
¡SE HUERTERO, SE FELIZ!