Argentina es conocida por contar con una gastronomía de nivel mundial y sus heladerías no son la excepción. Ya sea por la calidad de la materia prima utilizada o por la tradición de los inmigrantes italianos, nuestro país se destaca por fabricar algunos de los helados más ricos del mundo.
Luego de Italia, Argentina es considerada a nivel mundial como productora de uno de los mejores helados, en especial por las materias primas de calidad que se utilizan en el proceso.
Según la Asociación Fabricantes Artesanales de Helados y Afines(AFADHYA), la mayoría de los argentinos consideran a este alimento como una herramienta para mejorar el estado de ánimo y reducir tanto el estrés como la angustia.
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Rappanui y su helado de chocolate. (LMN).
Oriunda de Bariloche (1996), esta heladería se ubicó en el puesto 29 de la lista. La reconocida empresa nació como una fábrica de chocolate en el sur argentino bajo el nombre Tronador.
Rapanui sumará una planta más de producción en el distrito de Pilar, más precisamente en la localidad de Fátima. La planta tendrá unos 5.500 metros cuadrados y empleará a más de 200 personas. La elección del distrito fue estratégica para mejorar la logística de distribución de la compañía en América Latina. Con esta nueva planta, ya suma tres fábricas: la primera en Bariloche, la segunda en España (2020), y ahora una más en Pilar.
La familia Fenoglio lleva ya tres décadas produciendo uno de los mejores chocolates y helados artesanales del país. "Rapanui" proviene del nombre de la casa de la infancia de su fundador, Aldo Fenoglio, que queda en Bariloche.
Taste Atlas subrayó el sabor de chocolate y sus numerosas combinaciones como el más icónico de la heladería. "Una indulgente mezcla de chocolate e ingredientes locales que reflejan los sabores de la región de la Patagonia", indicó la guía.
Sin desatender su casa madre en Bariloche, Rapanui supo crecer y conquistar paladares en diferentes regiones del país. Estas son las sucursales donde podés probar su helado de categoría mundial.
. Bariloche, en Mitre 202 y en la base del Cerro Catedral
. Ciudad de Córdoba, en Av. Hipólito Yrigoyen 552.
En Buenos Aires:
. Devoto, en Av. Lincoln 4218
. Colegiales, en Av. Elcano 3127
. Recoleta, en Arenales 2302 y en Uruguay 1284
. Palermo, en Malabia 2014
. Caballito, en Av. Pedro goyea 1515
. Retiro, en Av. Santa Fe772
. Las Lomitas, en Italia 320.
. Nordelta, en Chateau Portal. Del Portal 35, local 1.
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El helado de Cadore. (Cadore).
La heladería Cadore se fundó en 1957 y tiene sus orígenes en Italia. Durante la Segunda Guerra Mundial, Silvestre Olivotti llegó al país junto a su mujer para buscar refugio. Sin embargo, no solo encontró un lugar donde estar a salvo, sino también la oportunidad de comenzar un nuevo negocio.
Su sabor más icónico según la guía es el dulce de leche, "un rico helado de caramelo con chispas de chocolate que combina a la perfección la técnica italiana con un querido sabor argentino."
Cadore tiene dos locales: uno en Avenida Corrientes 1695 fundado por Silvestre (premiado por Taste Atlas) y otro en Cuencia 2977, fundado por Ivo Olivotti, hermano de Silvestre.
Cada uno de ellos produce su propio helado in situ, respetando los principios de la elaboración artesanal. No obstante, el local de San Nicolás y el de Villa del Parque comparten la receta original.
El sabor estrella de Scannapieco es el dulce de leche granizado. (Scannapieco)..png
El sabor estrella de Scannapieco es el dulce de leche granizado. (Scannapieco).
Por último, pero no menos importante se encuentra Scannapieco. Esta heladería histórica de Buenos Aires tiene sus orígenes mucho más atrás en el tiempo y se remonta al año 1938. Su nombre se debe al apellido de una familia de inmigrantes italianos que la fundó.
El sabor más icónico de la tienda es el dulce de leche granizado, "un rico y cremoso helado de caramelo con chispas de chocolate", destaca la guía gastronómica.
La afamada heladería tiene dos sucursales: una en Colegiales, en Av. Álvarez Thomas 10, y otra en el local 7 del Paseo de La Plaza, en Av. Corrientes 1660.