Las plantas no solo embellecen nuestros espacios durante el día, sino que algunas tienen la capacidad de seguir mostrando su esplendor incluso de noche. Existen variedades que, además de ofrecer colores y formas atractivas durante el día, tienen características que las hacen resistentes al calor y capaces de iluminar el jardín en las horas nocturnas.
Estas plantas no solo agregan un toque de frescura y naturaleza a nuestros jardines, sino que también aportan un efecto visual encantador al reflejar la luz de la luna o incluso al brillar por su propio resplandor. Se trata de la cineraria marítima, el curry, la Santolina y la lavanda. En la nota sus secretos.
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Cineraria marítima. (blogspot.com).
1. CINERARIA MARÍTIMA
Las hojas de la Cineraria Marítima son lobuladas, con márgenes dentados, y tienen una textura suave al tacto debido a una fina capa de vellosidad que las cubre. En cuanto a las flores, aunque no son su principal atractivo, cuando florecen en primavera o verano, producen pequeñas flores amarillas que emergen en grupos, formando ramos pequeños que contrastan con su follaje plateado.
Es una planta muy resistente a la exposición solar directa ya las altas temperaturas, lo que la hace ideal para jardines con climas cálidos. También es bastante tolerante a la sequía una vez establecida, lo que la convierte en una opción práctica para jardines de bajo mantenimiento.
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El curry. (Freepik).
2. CURRY
El Curry tiene hojas pequeñas, de un verde brillante, que se usan frescas en la cocina, pero lo que la hace especial en un jardín es su capacidad para agregar un toque distintivo tanto de color como de aroma. Esta planta puede crecer como un arbusto o árbol pequeño, alcanzando una altura de hasta 3 metros si se cultiva en condiciones óptimas. Solo requiere de cuidados básicos para su crecimiento, por lo que es ideal para los principiantes en jardinería.
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La Santolina. (bing.com).
3. SANTOLINA
La Santolina, también conocida como artemisa femenina, presenta otro espléndido aroma, pero al mismo tiempo es muy popular gracias a la forma de sus hojas y por sus flores amarillas. Sus tallos son delgados y presentan un llamativo tono grisáceo.
Necesita de abundante iluminación solar y un riego poco frecuente.
Se trata de un ejemplar ornamental que además cuenta con propiedades medicinales. Las partes de la planta más utilizadas son las flores, utilizándose de 6 a 8 flores para infusión. Para su aplicación sobre la piel, también podemos adquirir el extracto de aceite puro.
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La lavanda. (minutoneuquen.com).
4. LAVANDA
Las hojas de la lavanda son estrechas, de color verde grisáceo, y tienen una textura suave y aterciopelada, lo que las hace agradables al tacto. Lo que realmente la distingue, sin embargo, son sus flores, que crecen en espigas verticales. Estas flores pueden ser de un hermoso color morado, aunque también existen variedades de lavanda blanca o rosa. La lavanda florece principalmente durante la primavera y el verano, creando un contraste espectacular con su follaje gris y emitiendo un aroma inconfundible y relajante.
En la noche, la lavanda se convierte en una de las plantas que “ilumina” el jardín de una manera única. Aunque no tiene propiedades lumínicas propias, su aroma intenso y relajante se intensifica al caer la noche, especialmente en ambientes cálidos.
¿LO SABÍAS?
¡MANOS A LA TIERRA YA!