El Chacal dominó de principio a fin para coronarse unánimemente con el cinturón latino welter de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), al vencer al invicto pampeano Gerónimo Vázquez.
El Chacal dominó de principio a fin para coronarse unánimemente con el cinturón latino welter de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), al vencer al invicto pampeano Gerónimo Vázquez.
Yoel Peralta se impuso en la velada realizada el sábado por la noche en el Casino de Buenos Aires, luciendo un boxeo contundente y borrando del cuadrilátero a un rival que llegaba como favorito por su campaña. Los jueces Javier Geido, Jorge Gorini y Carlos Azzinnaro lo dieron ganador, tras 10 rounds, al coincidir en 100-88.
“Se dio la pelea que quería, la disfruté de principio a fin”, tiró el púgil de Del Viso en diálogo con Código Plaza (FM Plaza 92.1).
El púgil de Del Viso, que llegaba con récord de 13 triunfos (3 nocauts), 1 derrota, 1 empate y número 3 en el ranking argentino de la categoría, es el actual monarca latino plata welter del Consejo Mundial (CMB), expuso en el ring toda su inteligencia, velocidad y precisión en los golpes para derrotar con clase a Vázquez (15-1, 3 KOs) y 6º en el ranking nacional.
“Por lo que significaba la pelea, el compromiso que representaba para mí, me pude soltar y demostrar mi boxeo”, expresó.
Peralta hizo pesar su mayor experiencia, nivel de oposición y capacidad para contrarrestar cada cruce y explotar las dificultades defensivas de Vázquez. De movida, el Chacal apostó todo a ganador en el Casino y casi lo consigue cuando lo derribó en el primer round al tomar mal parado al pampeano con una izquierda y derecha arriba en la mandíbula.
“Salió la pelea que planificamos, ya lo teníamos estudiado, vimos muchos videos de él, es un buen boxeador pero no movidizo. Logré sacarlo de su juego y se volvió loco. Por suerte salió todo bien”, consideró.
Yoel disfrutaba del combate ante un “Caballero” Vázquez desorientado y en el quinto asalto, ya con un corte en el ojo derecho, tiró un mordisco por lo que el árbitro Gerardo Poggi le descontó un punto.
“Mis amigos y mi familia se ríen porque todavía tengo el mordisco en el hombro. Con eso te das cuenta que estaba sacado, no sabía qué hacer”, contó.
El Chacal mantuvo la concentración, trabajó y controló el combate tirando toda su técnica y manteniendo la distancia sobre un adversario ya sin reacción.
A los 28 años, el hermano menor del multicampeón Yamil Peralta, sumó su segunda corona como profesional con una brillante actuación que lo llevó a festejar de una manera especial su nueva consagración.
El próximo paso de Peralta en su carrera como profesional es ir por el título argentino welter. “Quiero pelear por el título argentino, tiene un gustito diferente. El campeón es José Rosa, pero por lo dijo cambiaría de categoría y como no haría defensa quedaría vacante”, contó.