Mensaje del cura párroco de Pilar, Jorge Ritacco, por las Fiestas Patronales.
Estamos transitando la novena en honor a nuestra Virgen del Pilar. Es una época de preparación. En estos nueve días intensos nos preparamos para las Fiestas Patronales, o sea, no sólo hacia afuera con un montón de cosas que hacemos, sino también preparamos el corazón.
Es un tiempo de conversión, de vuelta a Dios. Entonces aprovechamos los nueve días para ello. Hacemos la visita a la Virgen y el día misionero en cada una de las comunidades. Vamos a visitar las casas, a caminar y a misionar un poquito.
La verdad es que a todos lugares donde esté yendo la Virgen la reciben con alegría, porque las comunidades están realmente agradecidas con su visita. La parroquia es Comunidad de comunidades y se hace el festejo patronal no sólo en el templo parroquial, sino que también son importantes todas las comunidades que lo forman.
Este 12 de octubre, la celebración es en domingo y en un año importante porque es el año jubilar. Nuestra diócesis va a tener dos años jubilares, este año 2025 que estamos transitando porque es universal y el año que viene, 2026, cuando se cumplen los 50 años de la diócesis y creación de la misma.
Este año ha tenido la particularidad que lo que hacemos dentro de la parroquia por las Patronales -que la Virgen visite las comunidades- también ha ido más allá, porque ha visitado todas las parroquias del decanato. El decanato es un conjunto pastoral de todas las parroquias: el nuestro se llama Nuestra Señora del Pilar y abarca todas las parroquias del Partido. Por ello, desde septiembre está visitando las parroquias para concluir este domingo 12 de octubre con la procesión y la misa por la tarde.
La procesión saldrá de la intersección de la colectora de Panamericana y la calle Rivadavia, para concluir en el centro en la Plaza, con nuestra Patrona en la Parroquia, donde celebraremos la Eucaristía concelebrada con los obispos y los párrocos de todo el decanato, para concluir el año jubilar.
Por todo esto, María desde el Pilar nos sigue acompañando. Esta advocación Mariana es la más antigua y espero que nunca se baje, porque desde ese pilar puede otear toda nuestra vida.
Por algo leemos el Evangelio de San Juan (cap. 19, 25-27), aquello de María al pie de la Cruz: madre, he ahí a tus hijos; hijos he ahí a tu madre. Y esto es lo lindo que María sea la madre y que siempre esté al lado nuestro, sobre todo paradita al lado de nuestras cruces, el país, el mundo, todo que estamos viviendo tan intensamente en los últimos tiempos, las cruces de todos los días. Y María, justamente nos muestra el camino por donde seguirá su hijo Jesús.
Es la primera advocación porque aún estando viva se le apareció al Apóstol Santiago y desde esa época siempre nos acompañó a los cristianos. Tenemos que estar muy orgullosos de esta fiesta, no debemos perderla. No sólo a nivel religioso sino histórico; en eso están trabajando la gente de Museo Parroquial, porque tuvo que ver mucho con este pueblo, con esta ciudad que eligió María para quedarse, siendo el centro de la vida de Pilar.
¡Felices Fiestas Patronales!