El cielo volvió a llenarse de visitantes por estos días, ante la sorpresa de los observadores que no paran de preguntarse por el origen de las aves que están revoloteando la avenida Tratado del Pilar en la intersección con Ruta 8.
Pueden observarse sobre la avenida Tratado del Pilar en la intersección con Ruta 8. Las bandadas pasan por el distrito de ida y vuelta en su corredor continental de migración.
El cielo volvió a llenarse de visitantes por estos días, ante la sorpresa de los observadores que no paran de preguntarse por el origen de las aves que están revoloteando la avenida Tratado del Pilar en la intersección con Ruta 8.
Muchos de ellos se posan sobre los cables del tendido eléctrico y otros sobre los árboles linderos, y la mayoría vuelan por encima de la estación de servicio YPF.
Se trata de pájaros cosmopolitas migratorios denominados estorninos pintos, europeos o comunes. De nombre científico Sturnus vulgaris y de la familia zoológica estornidos, en general poseen plumaje negro con brillos purpuras o verdes a modo de tordos, patas rojizas y pico negro.
Son omnívoros, comen frutas, semillas e insectos y sus predadores son los gavilanes y halcones. Las bandadas de estorninos forman en el cielo una apretada forma semiesférica que se expande y contrae al ritmo del vuelo.
Tal como informó el profesor Fernando D´Auria a El Diario años atrás, precisamente en Pilar estas bandadas de pájaros migratorios pasaron siempre por nuestros pagos de ida y vuelta de su corredor continental de migración, pero sus descansos no se daban en la zona urbana sino en la periferia, con abundante vegetación de las chacras y campos circundantes a nuestro centro cívico. La construcción de la Panamericana y la tala para el tendido eléctrico desde General Rodríguez en ruta 28, más otros emprendimientos, produjeron poda y extracción de esas arboledas de descanso de las bandadas de estorninos.
Por lo tanto, a estos pájaros no les queda otra que descansar en nuestra plaza central con frondosas arboledas de plátanos que, diseñados en cuatro galerías, convergen hacia el centro de la plaza.La gran cantidad de individuos que forman la población de estorninos hacen que estos plátanos mencionados se llenen a la nochey generen ruidos muy molestos por sus trinares desafinados y continuos. Pero el mayor inconveniente es la gran cantidad de excrementos blanquecinos que caen en las veredas. Que fermentan, creando una atmósfera maloliente y fétida con la imposibilidad de transitar cómodamente.
En breve tiempo, entre 5 a 15 días, esta bandada migrante seguirá viaje. Hay que tener en cuenta que ya no se halla buena cantidad de sus predadores naturales de la cadena alimentaria a la cual pertenece la especie, halcones y gavilanes, que pudieran espantar y/o regular la población como control biológico.
A nivel tecnología estas bandadas se espantan con equipos de sonido especial que se pueden usar, pero irían a arboles de propiedades privadas.