Este martes, Laboratorios Richmond anunció el final de la construcción de VIDA, la fábrica de vacunas de enormes dimensiones y capacidad de producción instalada en el Parque Industrial Pilar.
La planta VIDA está ubicada en el Parque Industrial Pilar. Se estima que comenzará a producir en julio. Hará 400 millones de vacunas por año.
Este martes, Laboratorios Richmond anunció el final de la construcción de VIDA, la fábrica de vacunas de enormes dimensiones y capacidad de producción instalada en el Parque Industrial Pilar.
La planta biotecnológica se hizo realidad tras una inversión de 85 millones de dólares. Allí, vacunas y otros medicamentos podrán producirse en todo su proceso, de principio a fin, algo innovador para el país.
El sitio comenzará a funcionar en la segunda mitad del año. La sigla que le da nombre significa “Vacuna de Inmunización para el Desarrollo Argentino” y el proyecto nació durante la pandemia de Covid-19.
En cuanto a su capacidad de producción, en Richmond indicaron que, trabajando en dos turnos, la capacidad de producción será de unos 80 millones de viales (como para unas 400 millones de vacunas) y unas 28 millones de jeringas prearmadas por año, tal como informó la periodista Irene Hartmann –del diario Clarín-, quien tuvo la oportunidad de recorrer la planta junto a periodistas de varios medios, guiados por el propio presidente de Richmond, Marcelo Figueiras.
El equipamiento fue importado de países como Alemania, China, Italia y Estados Unidos, utilizando calderas nacionales. A su vez, el empresario destacó ante los cronistas que “es el primer fondo fiduciario calificado de sostenible, verde y social por la Comisión Nacional de Valores” y cuya construcción se guió por “estándares LEED Gold”, expresión que alude a Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental.
A la cifra millonaria en dólares para su construcción se llegó a partir de un fideicomiso en el que participaron cerca de 60 inversores públicos y privados, incluyendo instituciones financieras y empresas del sector de salud. La recuperación de la inversión está calculada en unos diez años.
Si bien la apertura se esperaba para 2022, Figueiras explicó incluso que “teníamos vendidas 50 millones de dosis (de vacunas contra el Covid) a la espera de la aprobación de la OMS, algo que no se dio”. Pero, además, “ahí estalla la guerra (entre Rusia y Ucrania) y nos quedamos sin esos pedidos. Lo que demoró la inauguración de la planta fue, por un lado, la guerra, pero también las demoras en la Aduana. Fue alrededor de un año de demora. Lo de las importaciones nos afectó muchísimo”.
La apertura de VIDA se hará en tres etapas. De la misma forma, se explicó que habrá diferencias entre producir medicación fabricada “de cero” en el país y darle el cierre a productos elaborados por farmacéuticas del exterior con las que Richmond mantiene convenios.
Por el momento se adelantó que los primeros productos en salir de la planta será algunas partidas de la vacuna contra el Covid Convidencia (de Cansino) y de insulinas.
Con el tiempo se sumarán productos nuevos y otros que el laboratorio ya está elaborando, como medicación contra el VIH-Sida, remedios oncológicos y anticuerpos monoclonales. Entre las vacunas, varias forman parte del calendario obligatorio pero en la actualidad no se producen en el país.