Ser o no ser, esa es la cuestión que atraviesa al semáforo de la entrada de la calle Mateo Gelves -más conocida como El Petrel- principal acceso al Parque Industria para el tránsito liviano, a la altura del Km. 55,5 de la Panamericana.
Ser o no ser, esa es la cuestión que atraviesa al semáforo de la entrada de la calle Mateo Gelves -más conocida como El Petrel- principal acceso al Parque Industria para el tránsito liviano, a la altura del Km. 55,5 de la Panamericana.
El dilema está planteado y al día de hoy, parece estar lejos de la solución. Debido al caudal de tránsito que circula por la arteria en los horarios de ingreso y egreso laboral, teniendo en cuenta que se trata del parque Industrial más grande de Latinoamérica con 200 empresas radicadas y unos 20.000 trabajadores que acceden a él cada día- el semáforo se convierte en un verdadero obstáculo para la circulación vehicular.
Tanto es así, que en horas pico las colas para ingresar a El Petrel llegan a extenderse hasta la bajada anterior de la Panamericana sentido a Provincia, bocinazos y malestar de por medio.
La misma situación se recrea en el puente en cuestión, de doble circulación, colapsado por quienes acceden desde la mencionada mano, por los vehículos provenientes desde la calle Río de Janeiro y por aquellos que suben desde la mano a CABA.
Esta situación dificulta la circulación incluso para quienes cruzan el puente en destino contrario, tanto vecinos de la zona como trabajadores a contraturno, quienes ven obstruido el paso para poder abordar la autopista.
Por la tarde, sobre la calle El Petrel el caos cambia de sentido y las filas se extienden por varios kilómetros llegando hasta la altura del Río Luján.
Del lado de enfrente de a polémica, se encuentran los habitantes de la zona que advierten sobre las dificultades para cruzar la calle a esa altura en las horas de mayor caudal vehicular, si el semáforo deja de funcionar tal como sucedía hasta hace unos días.
Es que coincidiendo con el aumento del tránsito que trajo aparejada el regreso a la presencialidad de muchas empresas, y a raíz del caos que generaba, el semáforo permaneció en intermitente hasta la semana pasada. No obstante, dada las quejas de comerciantes y vecinos del lugar el aparato volvió a ponerse en funcionamiento.
Frente a esta situación, la pregunta está sobre la mesa y demanda una respuesta ¿Qué hacer con el semáforo de El Petrel?