Por la naturaleza de su trabajo, los odontólogos corren riesgo a diario en el marco de la pandemia de Covid-19, debido a la cercanía con el rostro y boca de sus pacientes.
Por la naturaleza de su trabajo, los odontólogos corren riesgo a diario en el marco de la pandemia de Covid-19, debido a la cercanía con el rostro y boca de sus pacientes.
En este sentido, desde el Colegio de Odontólogos de la Provincia reclamaron que aún hay más de 500 profesionales que no han recibido al menos una dosis de alguna de las vacunas que se aplican en el país.
“Hicimos un relevamiento a nivel provincial de los odontólogos que no han recibido aún la primera dosis y son 539 profesionales”, expresó a Código Plaza (FM Plaza 92.1) Ángel Garcé, odontólogo pilarense y además titular del distrito V del Colegio de Odontólogos de la Provincia.
Sobre esto, añadió que “informamos a la Dirección de Salud Bucal del Ministerio de Salud por esta preocupación, pero la respuesta no nos termina de satisfacer. Nos dicen que se está trabajando de acuerdo a un cronograma”.
Garcé señaló además que, en los últimos días, “como presidente del distrito V me enteré del fallecimiento de dos odontólogos por Covid, uno de Garín y otro de Luján. Somos un equipo que está desprotegido, me siento impotente porque estamos haciendo todo lo que se puede, pero no alcanza”.
El odontólogo local, miembro además del Consejo Superior del Colegio (Cosucoba), aseguró que junto a sus colegas “estamos trabajando de frente al virus, pero más de 500 odontólogos no han recibido la primera dosis. Es alto el porcentaje de los vacunados, pero trabajamos en la boca de los pacientes”.
En este sentido, recordó que “el odontólogo tiene un régimen que lo hace jubilarse a los 70, por lo que tenemos muchos en actividad que están en edad de riesgo”.
Además, recordó que por la pandemia “cambió el protocolo, por paciente se usa lo mismo que antes se utilizaba para una cirugía. Por suerte hubo muchas empresas que fueron adaptando los rubros y se dedicaron a la confección de estos elementos, bajando los precios”.
Mientras tanto, la atención está abierta pero con condicionamientos: “Por ejemplo, hay que dejar 30 o 40 minutos entre pacientes para ventilar, usando sí o sí los elementos de protección”.