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Empleada municipal ganó pasantía para trabajar en la OEA

Es una de los cuatro argentinos seleccionados para ir a Washington. El Municipio le negó licencia y la despidió. Ducoté prometió conservarle el trabajo.

Por Redacción Pilar a Diario 19 de mayo de 2018 - 00:00

Hace un mes, Mariela Morittu recibió una de las mejores noticias de su vida. Empleada municipal y abogada egresada de la UBA, fue seleccionada por la Organización de los Estados Americanos (OEA) para realizar una pasantía por tres meses en la oficina central del organismo, en Washington, a solo una cuadra de la Casa Blanca. Solo otros tres argentinos fueron elegidos, siendo ella la única pilarense en poder lograrlo.
Sin embargo, en las últimas horas, otra noticia casi le empaña, al menos en parte, su sueño. Empleada municipal desde hace siete años, el jueves la llamaron desde el área de Recursos Humanos para exigirle la renuncia ya que no estaban dispuestos a otorgarle una licencia por los tres meses que estará perfeccionándose en los Estados Unidos.
“Todos los años se abre concurso público para poder aplicar para distintas pasantías en la OEA. Uno tiene que cumplir con ciertos requisitos, desde el promedio universitario, hasta dos cartas de recomendación”, comenzó Morittu.
Esperanzada, la pilarense atravesó con ansias la espera hasta recibir una respuesta, que le llegó un mes atrás, cuando le comunicaron que había sido una de las cuatro argentinas elegidas. “Quedé seleccionada para desempeñarme en la sección de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que pertenece a la OEA, con sede en Washington”, contó con entusiasmo.
La pasantía no es remunerada y la joven abogada debe afrontar absolutamente todos los gastos. Actualmente trabaja bajo el régimen de “contratada” y en carácter de asesora, cuando en realidad cumple tareas como empleada regular en el área de Catastro Técnico. Por eso consideró que el Municipio podía conservarle el trabajo, con goce de sueldo para, a su vuelta, volcar su experiencia en la administración municipal.
Pero lo que llegó fue un pedido para que renunciara porque no encuadraba en la categoría de planta permanente. “Me dijeron que me felicitaban muchísimo, pero que me tenían que pedir que me vaya, prometiéndome que cuando regresara me volverían a contratar, sabiendo que así perdería todos los beneficios que debería tener por siete años trabajados, incluso la antigüedad”.
Horas después de contar su situación por FM Plaza y conocida la noticia en pilaradiario.com, Mariela recibió un llamado del intendente Nicolás Ducoté diciéndole que desconocía la situación y comprometiéndose, de palabra, a hacer “todo lo posible” para que la abogada pilarense conserve su puesto de trabajo.

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