Un hecho trascendental para la humanidad transformado en comedia dramática, gracias a esta magistral película alemana. La historia se sitúa en 1989 y 1990, momentos trascendentales para Berlín y Alemania toda, gracias a la caída del muro. Christiane, activista del comunismo, sufre un golpe y atraviesa ocho meses en coma. Al despertar -ya con el muro derrumbado- su hijo Alex hará todo lo posible para disfrazarle la realidad, haciéndole creer que todo sigue igual, situación que le traerá más de un dolor de cabeza debido a que varias veces su plan tambaleará ante los enormes cambios.