El próximo lunes, Fénix volverá a los entrenamientos para realizar la pretemporada de cara a la segunda rueda del torneo de la Primera C que lo tiene en el pelotón de los de arriba.
En la cuenta regresiva para encarar esta nueva etapa los dirigentes del Albinegro no tienen como prioridad el mercado de pases y aguardan con cautela el regreso del entrenador Oscar Santángelo para acordar sus pretensiones en cuanto a los refuerzos.
En medio de los rumores sobre la llegada de jugadores de distintos clubes de la categoría e incluso de divisiones superiores, el vicepresidente segundo de la institución, César Mansilla, remarcó a El Diario: “desmiento toda versión sobre el interés de Fénix por algún jugador” y aseguró que el lunes cuando llegue el rosarino de sus vacaciones se definirá si habrá incorporaciones.
Tras la primera fecha de la segunda rueda, en la igualdad frente a Laferrere, el DT demostraba su conformidad con el plantel con el que cuenta.
Incluso en el final del año quedó confirmado en boca de los dirigentes que ninguno de los jugadores del plantel dejaría el club.
En tanto, la recuperación de Nahuel Palavecino es una de las prioridades del técnico y los dirigentes. El enganche, comenzaría la pretemporada tras la rotura de ligamentos cruzados que lo marginó de la primera rueda.
La vuelta
El regreso al contacto con la redonda será el próximo lunes, aunque durante las primeras semanas el trabajo sería a pleno en lo físico y la pelota miraría desde afuera.
En la edición de ayer de El Diario, se conoció que tras el fallecimiento del profesor Roberto Daguerre, se haría cargo de la parte física, Hernán Puerta.
El hombre que viene de formar parte del excuerpo técnico de Tigre, junto al Vasco Arruabarrena y que acompañó a Roberto Sensini en su paso por Newell’s, ahora se unirá a otro rosarino de cuna.
La pretemporada del conjunto pilarense se llevará a cabo en el Complejo Oliden, ubicado en el kilómetro 43,500 de la Autopista Panamericana, en Del Viso.
El dato
Repetir y mejorar
A Fénix no le fue para nada mal sosteniendo las bases y demostró la cualidad de ir mejorando con cada desafío.
Con la base de aquel equipo que perdió la categoría en 2011, supo renacer de entre las cenizas, reorganizarse y realizar una gran campaña en la Primera D, cosechando 73 puntos en 34 partidos (21 triunfos, 10 empates y 3 derrotas).
Con el título y el ascenso consumados, mantuvo la base del plantel para dar pelea en la Primera C, donde lleva 37 puntos y está a solo 6 del puntero. Con ese mismo plantel, con el que encararía lo que resta del año, se consagró como el mejor equipo argentino de las 5 categorías de AFA en el año calendario (2012), logrando una efectividad del 69,4% sumando 77 puntos en 37 choques.