En Pilar existen unos 5.000 vigiladores privados y menos de 500 policías.
En Pilar existen unos 5.000 vigiladores privados y menos de 500 policías.
La ola de robos a countries y barrios privados que se reavivó en los últimos días en Pilar y en otras localidades del Gran Buenos Aires colocó en el eje del debate el tema de que la policía pueda ingresar a las urbanizaciones cerradas a fin de complementar la acción de de los vigiladores de las agencias de seguridad.
Lo curioso es que, según un sondeo realizado por El Diario entre representantes de los diferentes actores involucrados en esta problemática, nadie se opone a la posibilidad de que los efectivos de las comisarías actúen con el propósito de combatir el delito intramuros, más allá de que los countries cuenten con recursos propios y con equipamiento muchas veces de última generación para preservar la seguridad de sus habitantes.
De acuerdo a lo manifestado por los referentes consultados, nunca debería haberse dado una disociación entre “los de adentro” y “los de afuera” (de las urbanizaciones cerradas) en materia de seguridad pública, debido a que al éxito en el combate contra el delito sólo se arriba –aseguran- mediante medidas integrales y articuladas entre las agencias privadas y la policía.
Por estos días, y tras la reiteración de los asaltos dentro de los countries, se comenzó a trabajar en una legislación provincial que, de una vez por todas, logre plasmar en hechos concretos la integración entre custodios y efectivos policiales en pos de la prevención (ver página 7).
“Lo que impulsamos y apoyamos no es que la policía ingrese a custodiar los countries, sino que lo que reiteramos es que debe haber un trabajo articulado entre la policía y las agencias de seguridad en beneficio de todos. Me parece muy bien que haya mayor apertura desde los countries y que se empiece a entender que nadie se va a salvar por más que ponga alarmas, barreras, cámaras o alambrados. Lo único que puede mejorar la situación es articular los recursos públicos y privados en pos de la seguridad de todos”, consideró la concejal oficialista y presidente del Foro Vecinal de Seguridad de Del Viso, Liliana Alfaya.
Además, la mujer agregó que en un distrito como el de Pilar, donde existen 486 policías y 5 mil custodios privados para servir a una población que se acerca a los 300 mil habitantes, no es concebible desperdiciar el aporte que puede llegar a realizar el personal de las agencias a la prevención del delito en la comunidad en general. “No podemos esperar que egresen de la escuela de policía tantos efectivos como los que necesitamos en Pilar, porque para eso van a pasar años y a la vez la población va a seguir creciendo más rápido que la cantidad de policías. Por lo tanto, debemos actuar ahora y con los recursos que tenemos al alcance”, opinó la edil.
La visión empresaria
En el mismo sentido, al ser consultado por este medio, el presidente de la Cámara Argentina de Empresas de Seguridad e Investigación (CAESI), Aquiles Gorini -quien participó por estos días en reuniones con el gobernador Daniel Scioli y con otras autoridades provinciales tendientes a generar una normativa que promueva la prevención articulada del delito-, coincidió con Alfaya en que el espíritu que guió los encuentros de esta semana no promueve el ingreso de policías a los countries para realizar las tareas de vigilancia que hoy ejercen los privados, sino que apunta a “romper el divorcio” entre unos y otros que hasta la actualidad es público y notorio.
“Ya desde la época del ministro (León) Arslanián se viene promoviendo el trabajo articulado entre las empresas de seguridad privadas y la policía. La seguridad privada puede hacer su aporte a la seguridad en general, pero antes eso era una foto y nada más, ahora parece que la cosa va en serio”, añadió Gorini basándose en la sensación que le dejaron las reuniones de las últimas horas que tuvieron por objeto esbozar el borrador de una ley provincial en este sentido que avanzaría rápidamente en la legislatura bonaerense.
Por último, el titular de CAESI dejó en claro su postura de que los patrulleros deben estar en los barrios abiertos para realizar tareas preventivas en zonas donde los vecinos no tienen la posibilidad de invertir en seguridad privada, y acudir a los countries sólo ante una situación de alerta. No obstante, Gorini sostuvo que en la legislación vigente no existe ninguna disposición que le impida a la fuerza pública ingresar a las urbanizaciones cerradas.
“Es un tema de debate. Hay abogados que dicen que la policía puede entrar a los countries y otros que no, pero hay que acabar con las cuestiones interpretativas a través de la nueva ley. A mi criterio, sólo las casas son privadas, el resto se trata de espacios comunes. Incluso hay muchas calles dentro de algunos countries que son de libre circulación”, concluyó Gorini.
Liliana Alfaya: “Lo único que puede mejorar la situación es articular los recursos úblicos y privados en pos de la seguridad de todos”.
Aquiles Gorini: Hay abogados que dicen que la policía puede entrar a los countries y otros que no, pero hay que acabar con las cuestiones interpretativas”.
Francisco Dorignac: Nos debe preocupar la seguridad de todos, sin distinciones, porque nadie está exento de las cosas que pasan”.
Francisco Dorignac
“A Tortugas siempre entraron los patrulleros”
“Los patrulleros de la policía siempre entraron a Tortugas, nosotros no tenemos ningún problema con la policía. Incluso, nosotros le aportamos recursos a la policía, porque si tuvieran que depender solamente de lo que le aportan sus verdaderos responsables, entonces no tendrían nada”. De esta forma, el presidente del Tortugas Country Club, Francisco Dorignac dio su visión sobre el debate desatado a partir del recrudecimiento de la ola de robos contra las urbanizaciones privadas.
Dorignac aclaró además que “la policía entra a Tortugas de la misma forma que presta servicio en Manuel Alberti o en Tortuguitas, no hay incompatibilidad entre una cosa y la otra. Lo que sí me preocupa es que no lleguen desde la Provincia los efectivos policiales prometidos, porque eso hace a la seguridad de todos, los de los countries y de los que no viven en los countries. Nos debe preocupar la seguridad de todos, sin distinciones, porque nadie está exento de las cosas que pasan”.