Con el objetivo de seguir achicando la cuenta de subsidios a las tarifas de electricidad y gas, el gobierno de Javier Milei prepara otro cambio en el sistema.
Analizan implementar una segmentación más amplia. Se establecerá una Canasta Básica Energética. Y solo habría ayudas cuando el costo supere un porcentaje de los ingresos.
Con el objetivo de seguir achicando la cuenta de subsidios a las tarifas de electricidad y gas, el gobierno de Javier Milei prepara otro cambio en el sistema.
Espera aplicarlo a partir de mayo, en busca de restringir más la asistencia y recortar el gasto en esa partida como parte del objetivo de alcanzar el superávit fiscal.
En la audiencia pública que realizó este jueves, la Secretaría de Energía, a la que no asistió su titular Eduardo Rodríguez Chirillo, informó que analizan que la segmentación actual, la cual contempla tres niveles de ingresos (bajos, medios y altos), sea más amplia sobre la base de los deciles poblacionales.
El encargado de presentar ese punto fue Sergio Falzone, en carácter de asesor de Energía, aunque es posible que sea designado como subsecretario de Energía Eléctrica.
El ex directivo de Central Puerto realizó una explicación de la conformación de la Canasta Básica Energética (CBE), su valorización y en qué casos el Estado brindará asistencia a los usuarios.
Lo primero a tener en cuenta, dijo Falzone, es que la CBE determinará un nivel de consumo básico de electricidad y gas natural, dependiendo de la zona bioambiental del país de residencia y la cantidad de integrantes del “grupo conviviente”.
Como el acceso de gas natural por redes no es universal en el país, se tendrá en cuenta la situación de quienes consumen GLP envasado o utilicen solo la luz, que sí está presente en casi todas las regiones.
Así, el Estado subsidiará a los hogares residenciales cuando el costo de esa cesta supere un porcentaje determinado que será definido por Energía, algo que no había sido precisado hasta hoy. La asistencia podría ser por transferencias monetarias directas o un descuento en la factura.
Para la electricidad mostraron un ejemplo sobre un hogar que consume entre 150 y 200 kwh por mes, con un gasto de entre $15.400 y $20.600 mensuales.
Para el caso del gas, tomaron un consumo de entre 30 y 40 m3 por mes, con un costo de $13.800 y $18.400. Eso implica que el gasto necesario para cubrir la CBE podría ser valorizada entre $30.000 y $40.000, aunque Falzone aclaró que dependerá de la región del país en la que se encuentre el hogar y la cantidad de miembros que tenga.
Dijo que se evalúa segmentar a los usuarios en base a los deciles que informa el Indec, en donde 1 es el sector de menores ingresos y el 10 el de más altos.
Por caso, para el decil 1, con ingresos promedio de $132.749 mensuales, si la CBE supera el 2% de ese valor el hogar recibirá subsidios. Para el decil 2, $233.509 de ingreso promedio, si la CBE supera el 4% habrá asistencia.
Para el decil 3, con ingresos promedio de $319.467, la CBE no debería superar el 6% y para el decil 4, $392.605, el tope será de 8 por ciento. En caso de que la CBE supere ese porcentaje en el ingreso, habrá subvenciones para la luz y el gas. Para los deciles del 5 al 10, con ingresos medios de $475.252 hasta $1.990.927, la cesta deberá superar el 10% de los ingresos.