El freno a la actividad económica, que se siente con fuerza desde la asunción de Javier Milei como presidente, volvió a mostrar sus efectos en la provincia de Buenos Aires, donde la recaudación impositiva mostró otra baja significativa en abril.
Los ingresos bonaerenses cayeron 4,5% en abril. Y la coparticipación se desplomó un 20,6%. Lo señaló el Ministro de Economía, Pablo López. Responsabilizó a Milei.
El freno a la actividad económica, que se siente con fuerza desde la asunción de Javier Milei como presidente, volvió a mostrar sus efectos en la provincia de Buenos Aires, donde la recaudación impositiva mostró otra baja significativa en abril.
El Ministro de Economía de la Provincia de Buenos Aires, Pablo López, reveló este viernes en su cuenta de la red social X (@PabloJ_LopezOK) que los ingresos fiscales bonaerenses cayeron tanto en lo que hace a la recaudación propia como a la coparticipación.
En un punteo, el funcionario señaló que “los recursos tributarios de la Provincia reflejan la enorme caída de la actividad económica”.
El ese sentido, detalló que “en abril, la recaudación provincial cayó 4,5% y la coparticipación se desplomó 20,6%, en términos reales”.
El tobogán de los ingresos afecta a los municipios tanto por la merma de los recursos propios de la provincia para hacer obras y brindar servicios como por el achicamiento de la masa coparticipable. A eso se suma el freno del Gobierno nacional a la obra pública y el efecto de la recesión en las propias arcas comunales. El combo es explosivo.
López afirma que “el problema no es fiscal, sino una economía que se contrae a ritmo inédito”. Una situación que para el funcionario no es el efecto indeseado de una crisis, sino algo buscado por el Gobierno de Milei: “El Gobierno Nacional impulsa deliberadamente una recesión. Con argumentos fiscalistas, paradójicamente destruye la recaudación”.
“Dicen que asfixian a las provincias, pero en realidad están atentando contra los derechos a la salud, educación y seguridad de las y los argentinos”, apuntó López.
López fundamentó su preocupación con un repaso por los indicadores industriales de la provincia, en el que concluyó que “el Gobierno Nacional está dañando severamente el tejido productivo bonaerense”.
“El sector automotriz y la construcción contraen la actividad a tasas inéditas”, dijo. Y destacó que “en marzo, la fabricación de vehículos cayó 24%”, en tanto que la “producción y despacho de cemento se desplomaron 40%”.
“El 1° trimestre de 2024 redondeó valores que dan cuenta del pésimo panorama en el sector de la construcción. Todos los indicadores de la actividad caen de forma inapelable: despacho (-28%) y producción de cemento (-24%); producción de hierro (-15%) y producción de acero (-16%)”, detalló.
A la vez, destacó que “el sector automotriz, uno de los líderes de la recuperación en la pospandemia, está reduciendo fuertemente los niveles de producción”.
“Luego del récord registrado en 2023, la producción de vehículos en la Provincia se contrajo cerca de 20% en el 1° trimestre” de este año, comparó.
“La recesión deteriora la oferta y la demanda. El objetivo es consolidar una economía extractiva sin valor agregado nacional”, analizó López. Y contrapuso que en la provincia “existe un modelo opuesto, en el cual el Estado se hace cargo de garantizar los derechos sociales y la producción es el motor de la economía”.