A tres años de su última visita, Pedro Pastor y Los Locos Descalzos, vuelven a girar por Latinoamérica para presentar ‘Vueltas’, su cuarto disco. Estarán el jueves 9 de febrero en Pilar, en el Centro Cultural Piantao (Jorge Newbery, B1631 Pilar). Las entradas se consiguen por passline.com a un valor de $2500. (https://www.passline.com/eventos/pedro-pastor-y-los-locos-descalzos-0902) y el show comienza a las 20hs.
El nuevo disco, producido por el venezolano Gustavo Guerrero -productor de artistas como Natalia Lafourcade, Alex Ferreira o Silvana Estrada-, afianza aún más los sonidos y timbres latinos, centrándose especialmente en las músicas del Caribe.
Pedro Pastor, nacido en Madrid, es cantautor, compositor, guitarrista, viajero. Nace y crece entre canciones y versos (hijo de Luis Pastor y Lourdes Guerra), desde bien pequeño tiene una relación muy estrecha con la música pero no es hasta los 12 años que empieza a dedicarle horas a la guitarra y a la escritura, a los 13 compone su primera canción y desde entonces nunca ha parado de hacerlo.
Pedro Pastor y Los Locos Descalzos vuelven a la Argentina
A partir de los 15 años empieza a girar de guitarrista en los conciertos de Luis, el cual le deja cantar algunas canciones propias en mitad del show por lo que empieza a obtener visibilidad, a la par empieza a hacer conciertos en solitario. El primer acontecimiento importante de su carrera en solitario fue su primera presentación en el Café Libertad 8 de Madrid con 16 años, siendo el cantautor más joven en hacerlo.
En 2012, ya dedicándose plenamente al oficio de cantar, publica su primer EP, seis canciones autoeditadas bajo el título de "Aunque esté mal contarlo" que le llevarán a hacer a guitarra y voz, cien conciertos de presentación por todo el territorio español, vender 3000 copias exclusivamente en los conciertos, y colaborar con músicos de la talla de Chico César (Brasil), Pedro Guerra o Rozalén.
La carrera de Pedro es un acto de entrega, trabajo y conexión con su público que le han colocado en un lugar privilegiado de la canción de autor sin tener que sucumbir a ninguna multinacional, discográfica, distribuidora o empresa de management. Un trabajo meticulosamente autogestionado que merece la pena descubrir de a poco y dejarse abrazar por él.