Presidente Derqui está culminando uno de sus proyectos más ambiciosos como institución y dispondrá de un microestadio que le permitirá redistribuir sus actividades deportivas.
El Rojinegro decidió desprenderse de unos terrenos que poseía en la localidad e invertirlos en el cerramiento de la cancha de fútbol.
Con la obra terminada, le quedarán dos nuevas canchas de básquet (26x14), voley o baby fútbol, para poder cumplir con la demanda de sus socios.
“Vamos a saldar una necesidad de nuestra gente. Los chicos estaban entrenando apretados y muchas veces venían y teníamos que decirles que no, porque no había lugar para entrenar”, explicó Marcelo Fiore.
El director ejecutivo del Rojinegro destacó: “Lo importante es que vamos a tener dos canchas de entrenamiento. Vamos a empezar con la colocación de los tableros, los agujeros en el piso para que se inserten todas las actividades.”
Una de las canchas del nuevo microestadio se utilizará para básquet y la otra para voley. El fútbol pasará al gimnasio auxiliar. “Se reordenó todo”, explicó el directivo.
“El básquet femenino y masculino utilizará el gimnasio de parqué y una de las dos canchas del nuevo microestadio”, aclaró también.
La venta
Para poder cristalizar este emprendimiento, el club y sus socios debieron tomar una decisión clave con unos terrenos que tenían en la localidad.
Esas tierras se vendieron a través de una asamblea de socios. “Se pidió aprobación absoluta, si alguno se negaba, la operación no se realizaba. Lo aprobaron por mayoría absoluta en asamblea extraordinaria”, señaló Fiore.
El dinero también quedó establecido que sería utilizado para cerrar los dos gimnasios semicubiertos. Lo que era el de fútbol y el gimnasio auxiliar.
“En la misma asamblea se le solicitó a los socios que armen una comisión fiscalizadora (5 socios) para auditar que los fondos de la venta sean 100 por 100 utilizados en las obras de infraestructura”, subrayó. “Las empresas las eligió la Comisión Directiva y los socios aprobaron los gastos”, describió.
La obra que está muy avanzada comenzó el 29 de mayo con la ampliación del gimnasio auxiliar. Eran las dos viejas canchas de pádel, que pasaron de 500 metros cuadrados a 625 cubiertos.
Se le agregaron dos vestuarios y se vinculó con el pasillo central del colegio secundario. “Para que esté todo mejor comunicado. Se hizo el cerramiento lateral que no lo tenía”, contó el directivo.
El microestadio, el gimnasio principal que ahora tendrá Derqui, planean culminarlo para el 15 de septiembre. “Este es mucho más grande, de casi 1.300 metros cuadrados cubiertos”, aseguró.
En este gimnasio se diagramarán dos canchas de básquet de 26 por 14 metros atravesadas y la posibilidad de una principal utilizando todo el largo.
-¿La obra incluye tribunas?
- El proyecto final será con tribunas, pero todavía no está en los planes. Hay un proyecto, que ojalá algún día lo podamos llevar a la realidad. Tendría una capacidad de entre 1.500 y 2 mil personas sentadas. El presupuesto aprobado era para cerrarlo y hacer el piso con los vestuarios. Para prestarle un buen servicio a la cantidad de chicos que tenemos. Porque no damos abasto.
“No se suspenden más prácticas, partidos, más nada. Los días de lluvia tenían que ir a jugar al gimnasio de la Escuela Media, porque la liga no le permite suspender. Lo mismo que el voley, que tenía que jugar de visitante. Ahora se potencia todo”, concluyó Fiore.
A la medida
-¿La cancha de parqué se adaptará a las exigencias del Federal?
- Eso pasa a ser una obra que está entre las prioridades de la institución, pero no está programada todavía. La idea es ir adecuándola para que la próxima vez que se nos presente esta oportunidad, no tener la traba de la cancha.
Cada uno por su lado
El gimnasio de parqué, de esta manera, desde el 2014 se desafecta de la escuela, lo mismo que el hall de entrada, la cancha de bochas y la confitería, para que el club empiece a funcionar más temprano.
El colegio utilizará el gimnasio auxiliar y el microestadio para lo que sea educación física o eventos, actos o lo que hiciera falta.
Así el gimnasio de parqué tendrá más horas disponibles para actividades deportivas del club, que era otra de las necesidades que hacen al caso.
“Para que no estemos restringidos por el horario del colegio, que hasta las 17.30 no podíamos hacer nada”, señaló Fiore.
“Ahora se están cerrando los dos tímpanos. El que da a la calle Dorrego y lo último que se hace es lo que linda el gimnasio auxiliar con el microestadio, más que nada por una cuestión de orientación y evitar que el viento embolse todo”, explicó.