Fénix está muy cerca de abrochar el tercer refuerzo de cara a la temporada de la Primera C que comienza en agosto. Se trata del volante Maximiliano Cóceres, proveniente de Villa Dálmine y que desde hace dos días está entrenando junto al plantel que conduce Oscar Santángelo. Mientras se digiere la polémica por el entredicho que originó la situación del representante de Daniel González, en el Albinegro estarían a un paso de asegurarse el tercer refuerzo y el segundo para apuntalar la mitad del campo. En caso de concretarse, Pipi Cóceres integrará la nómina de incorporaciones junto a Nicolás Zárate e Iván Ramírez.
“Todavía no soy jugador de Fénix, faltan algunos detalles. Pero esperemos que se resuelva todo para bien”, aclaró el propio Cóceres, en diálogo con El Diario. “Estoy muy ilusionado porque sé que es club muy ordenado y que siempre intenta ser protagonista”, evaluó luego de un par de prácticas junto al Águila.
“Tengo conocidos que juegan acá como Leonel Bargas, Santiago Bonora y Leonardo Ruiz y ellos me hablaron muy bien de este club”, manifestó sobre las referencias previas que recibió y aseguró que “este grupo puede pelear arriba tranquilamente”.
De paso por Argentino de Merlo, Brown de Arrecifes, Colegiales y Villa Dálmine, Cóceres manifestó: “llego con toda la ilusión. Sabemos que el equipo siempre busca ser candidato y creo que con este grupo se puede pelear arriba tranquilamente”. “Ese es nuestro objetivo”, dijo después, ya con la camiseta de Fénix puesta.
Además, sobre sus metas personales, expresó: “vengo con la idea de jugar, pero en el último tiempo sufrí una serie de lesiones y necesito hacer una buena pretemporada para poder estar a la par de mis compañeros”. “Pienso que en unos días ya estaría cerca del nivel que tienen ellos”, concluyó, quien viene de conseguir el ascenso a Primera B con Villa Dálmine.
En movimiento
El Albinegro continúa con su puesta a punto en el predio deportivo del country Mapuche. Ayer, bajo un intenso frío, el grupo llevó a cabo trabajos físicos con pesas y ejercicios con pelota. Promediando el entrenamiento hubo práctica de fútbol en espacios reducidos. Por otro lado, cuatro jugadores se sometieron a sesiones de Kinesiología. Fueron Javier Valenzuela por un desgarro, Nicolás Zárate con una molestia en el pie, Santiago Bonora con una dolencia en la espalda y Nahuel Palavecino para continuar su recuperación tras la rotura de ligamentos cruzados.
Hoy el equipo de Pilar volverá a trabajar en Mapuche y se calcula que mañana temprano disputaría su primer amistoso de pretemporada frente a Villa Dálmine, que cuenta entre sus filas con Gastón Polaco Sánchez, ex Fénix.