José Fernando Dicenta (1929 - 1984) fue un actor, dramaturgo y poeta español nacido en una familia dedicada al arte. Como actor su consagración fue en el mundo de la radio formando parte de la cadena SEA, donde también escribió los guiones de numerosas radionovelas. En su faceta de dramaturgo debe destacarse su obra “La jaula”, por la que obtuvo el Premio Nacional de Teatro. Cultivó igualmente la poesía, que recopiló en las obras “Compañero, el hombre” y “La pirámide invertida”. Otros libros publicados fueron “Luis Bonafoux: La víbora de Asnieres”, y “La santa bohemia”. Sus compañeros destacan de él su gran cultura y su extremada sencillez. Personalmente era un hombre muy ingenuo, muy entrañable, dulce y solidario, con mucho carácter. Cantores de la talla de Alberto Cortez y Patxi Andion entre otros, pusieron voz a sus poesías.
“Se le rompió el corazón cuando amanecieron sus primeros 53 años”, dijo Cortez al conocer su fallecimiento. De él, de Dicenta, me conmovió hasta las lágrimas la siguiente poesía:
Dime, ¿qué tiras al agua?
Dime... qué tiras al agua?
Un público desconsuelo y una secreta esperanza. Lágrimas que no son mías, recuerdos y madrugadas, remordimientos antiguos, palabras, muchas palabras que por dichas, no conviene recordarlas. Y tu ¿qué tiras al agua?
Trabajos mal terminados, canciones inacabadas, nombres de malos amigos, dudas, y dos o tres cartas malamente concebidas y escritas en hora mala...
Dime... ¿qué tiras al agua?
Silencios. Muchos silencios. Desgracias, muchas desgracias, Desabridas actitudes, iras justificadas, tiempo inútil y perdido, deudas que nunca se pagan, tristezas no comprendidas, hambres, miserias humanas, vergüenzas inconfesables, limosnas no confesadas, consejos paternalistas, éxodos de casa en casa, y una desconsoladora sensación, dentro del alma. Y tú ¿qué tiras al agua?
Desatinos, desacuerdos, Mentiras innecesarias, traiciones no cometidas, promesas no consumadas, falsos credos, diferencias, hipócritas alabanzas, prejuicios imperdonables, conclusiones temerarias, resentimientos oscuros, frases desafortunadas... ¡Mi vida!... ¡Mi vida entera!
Mira, mira como se la lleva el agua...