Por Aldo Abel Beliera
Sólo está acreditado el paso del Padre de la Patria por la Posta de Fátima, rumbo a San Lorenzo. En ese combate cayó Juan Mateo Gelves y fue herido su hermano Luis Antonio, ambos de Del Viso.
Por Aldo Abel Beliera
En Pilar es una costumbre narrar los hechos históricos con un doble significado. Algunos ejemplos los hemos visto con la identidad del verdadero Lorenzo López Camelo, al cual se lo confundió con un pariente homónimo. La Cruz emplazada a un costado de la calle Pedro Lagrave, que está probado fue colocada en 1819 para señalar el pueblo nuevo y se le sigue adjudicando una leyenda protagonizada por unos religiosos. La iglesia declarada monumento histórico en dos oportunidades. Decir que la imagen que hoy vemos entronizada en el altar mayor del templo y que fuera colocada en el siglo pasado, es la misma “de bulto” que donara en el año 1730 doña María Cabezas, desconocer dónde se encuentra el Lugar del Milagro, sito en jurisdicción de Villa Rosa, confundiendo este sitio con un oratorio ubicado en Zelaya.
La actual parroquia, basándose en una estampa, decir fue inaugurada el 12 de octubre de 1856, siendo lo correcto el 24 de diciembre de ese año cuando fue bendecido el templo y la virgen patrona por el obispo don Mariano José de Escalada.
Se reitera constantemente que el “Pacto del Pilar” se firmó en el interior de la antigua capilla, cuando ese célebre tratado se realizó en un campamento adyacente “de la Capilla del Pilar”, como se denominaba o conocía el pueblo y al territorio de su jurisdicción en ese entonces.
Algunos van más lejos y refieren que Pancho Ramírez eligió el lugar por tener una amante o pretendiente hija de Lorenzo López quien lo recibió y homenajeó en su casa y otros disparates, ignorando que este último en esos momentos se hallaba en el sur comisionado por el gobierno y su única hija, ya casada y madre, residía con su familia en Buenos Aires, y otros casos, cuyo indudable origen se pierde en una interpretación sustentada por tradición.
Y en este contexto no puedo detenerme sin dejar de opinar respecto a las noticias ocurridas últimamente en el lugar donde se hallaba la “Posta de Pinazo”, según el informante refiere que San Martín el 29 de enero de 1813 pasó la noche, se bañó en el arroyo, perdió un anillo y cambió caballos para proseguir su marcha a San Lorenzo, provincia de Santa Fe, lugar donde el 3 de febrero de ese año se realizó el enfrentamiento contra los invasores españoles.
Me permito disentir con ello por tratarse de una fábula, cuya imaginación ha sumado otra falacia. En ningún documento se relatan estos hechos y menos haber permanecido San Martín en el lugar. En cambio en las anotaciones hechas por los maestros de las postas, advertimos una parada en Santos Lugares y otra en Pilar (hoy Fátima).
Pilar en 1813 tuvo tres postas. Tener en cuenta que en ese entonces el partido de General Sarmiento pertenecía a Pilar. Una estaba en el Río de Las Conchas y su encargado o “Maestro de Postas”, como se lo llamaba, era Cayetano Pardo, casado con Luisa Blanco. La segunda se hallaba en el arroyo Pinazo (o Escobar) y estaba a cargo del montañés Francisco Arnáes, hijo de José Arnáes y de Nicolasa Pinazo, hermana esta del Mariscal de Campo Manuel de Pinazo. Francisco había casado el 15-11-1783 en el Monasterio de Santa Catalina de Buenos Aires, con Manuela Tadea Pinazo, hija de padres no conocidos. La tercera era regenteada por Juan Alvarado, esposo de Bartola Ponce de León, hija de Pedro José Ponce de León y de María Magdalena Ábalos y se hallaba a escasos metros de la estación Fátima del F.C. General Urquiza (ex Posta Empalme, Empalme Lacroze y Estación Empalme) y del camino ancho de tierra (hoy avenida Atalaya) denominado en ese entonces “de los troperos” o “nuevo”. Este cruza la ruta 6, pasa por Etchegoyen, arroyo de la Cruz, Areco, Cañada Honda, Arrecifes, San Pedro, capilla del Rosario, etc., trayecto este usado por San Martín y los granaderos para llegar al convento de San Lorenzo.
Finalizo este breve artículo por estar próximo un nuevo aniversario del combate de San Lorenzo, rindiendo homenaje a los granaderos Juan Mateo Gelves, fallecido en dicha contienda el 3 de febrero de 1813 y a su hermano Luis Antonio Gelves, quien resultó herido y quedó inválido, ambos nacidos en tierras de la hoy localidad de Del Viso, partido del Pilar.