Las vidrieras pilarenses se vistieron para recibir la nueva temporada.
A todo color, el Interior del local de las Las Pequeñas Puritanas, en el centro.
Afuera los carteles de liquidación, las prendas pesadas y los tonos apagados. La primavera se instaló en las vidrieras locales con un shock de colores y estampados. Flores, rayas, tejidos artesanales, calzas, vestidos y remeras ultracortas: diseñadores pilarenses adelantan la moda para recibir la próxima temporada.
Una recorrida por el centro de Pilar alcanza para advertir el cambio rotundo. Lo que hasta la semana pasada era monocromático, hoy se reemplaza por una paleta generosa que aparece en estampados y texturas. Más cerca que nunca del lugar común, este año la primavera es sinónimo de flores, de todo tipo y tamaño.
“Este verano es para todos los gustos, como ejes propuestos están los looks romántico floral, naval y safari”, afirmó Virginia Pugliese, diseñadora de indumentaria y propietaria de la marca Juana Macana.
“El look romántico floral –amplió- viene con vestidos holgados y volados, un comodín para esta temporada ya que se prestan para usar solos, con shorts, con jeans o con calzas”, aunque aclaró que “morfológicamente nos encontramos con vestidos en sus dos propuestas, por un lado el suelto y por otro el ajustado, que resalta las formas bien femeninas”.
Color y más color
Basta con poner un pie en “Las Pequeñas Puritanas” (Rivadavia casi Ruta 8), para que el color invada desde todos los ángulos. Desde el local que reúne colecciones de diseñadores independientes, su propietaria Luciana Bianchi, reafirma lo que se observa en un primer vistazo: “hay un colorido más intenso que la temporada pasada, incluso hay fusión de diferentes estampados y bordados en una misma prenda”.
En los percheros, ganan las calzas estampadas, los shorts, las minis, las remeras de un solo hombro. Las camisolas y los vestidos, que, como particularidad, incorporan apliques en crochet en escote y espalda. Este tejido llega, además, en forma de chalecos y sacos livianos, siempre coloridos, ideales para media estación.
En Chemamma (Tucumán y Chacabuco), el diseñador Gonzalo Seguí coincidió con la estridencia de los estampados, aunque anticipó que esto alcanzará su pico máximo en la primavera, para dar paso en verano al estilo marinero, con rayas y predominio del azul. “Es un look masculino-femenino”, adelantó Seguí.
A su vez, destacó que del invierno siguen vigentes las lentejuelas y los encajes, y como incorporación llegan los enteritos strapless con pantalón.
Nota aparte merece el calzado, donde se consolidan los suecos, los peep toes (zapatos altísimos), el taco de corcho y las chatitas.
90‘s revival
Uso y abuso del jean (denim para los diseñadores), una estampa noventosa si las hay que vuelve esta temporada. “El look comienza a buscar reminiscencias en los principios de los noventa en pequeños detalles como los géneros, los estampados, las formas”, indicó Pugliese, para agregar que “para las muy atrevidas se propone el jean con jean, aunque corremos el riesgo de parecer o muy vanguardistas o de habernos quedado en el tiempo”.
Chalecos, camperas y hasta camisas de este género, llegan al mismo tiempo que las remeras por arriba del ombligo, que –excepto para las adolescentes- se recomiendan superpuestas a una remera más larga.
Al momento de los tips, la diseñadora recordó que “hay que tener en cuenta que la remera corta no va con chupines y menos si es ajustada. Se ajusta arriba o abajo”. n
Bajo la lupa
La mujer pilarense, osada pero no tanto
Más allá de su carácter globalizado, que indica de modo generalizado la tendencia a seguir, los detalles de la moda terminan de completarse con la influencia del ambiente del destinatario. De este modo, los diseñadores coinciden en que el entorno y la ciudad en la que una persona vive influyen directamente sobre la elección del vestuario.
En el caso de Pilar, para la diseñadora Virginia Pugliese “las mujeres no son tan fashion victims como en Capital”. “Están a la moda, pero con algo de temor al ridículo y eso las hace ser un poco más conservadoras”, agregó.
Es por esto que para Pugliese, “el look romántico floral es el ideal dentro de las propuestas de esta primavera para la mujer pilarense. Da la sensación de ser menos forzado que el militar o marinero, donde hay más riesgo de parecer disfrazada”.
Acompañando esta teoría, desde “Las Pequeñas Puritanas” afirmaron que “a la mujer pilarense le cuesta el animal print, es muy difícil que elijan este estampado”. En tanto que en Chemamma reconocieron que “hace unos años era raro que se animen a las minifaldas”, aunque aseguraron que la tendencia se revirtió la última temporada.