El Municipio asistirá con la exención de tasas municipales y una ayuda de $10.000 mensuales a los comercios que permanezcan cerrados a raíz de la pandemia. Podrán acceder a ambos beneficios aquellos titulares de locales que cuenten con habilitación y tengan domicilio en Pilar. El paquete se denomina “Programa de Comercios Cuidados”.
Para financiar este plan de asistencia, se deberá aplicar una modificación en la Ordenanza Fiscal Tributaria que contempla una suba del 28% a hipermercados y supermercados de grandes superficies y de un 50% a los bancos.
A su vez, se crearán nuevas categorías para las alícuotas que abona la industria: se aplicará un concepto progresivo, es decir que a mayor facturación irá aumentando el tributo, “para hacer un distrito más equitativo”, argumentaron desde el gobierno.
Con estos retoques (bancos, hipermercados y grandes industrias) se espera financiar la asistencia al pequeño comercio: se estima que el beneficio podría alcanzar a más de 3.000 locales del distrito.
En las próximas horas, el intendente Federico Achával enviará al Concejo Deliberante el programa para modificar la tributaria y apuesta a que sea rápidamente aprobado, lo que significaría además la vuelta a la actividad formal en el legislativo.
“A cada comerciante queremos decirle que no está solo, que somos conscientes del esfuerzo, y que este programa brindará asistencia económica para hacerle frente a gastos fijos, como cuentas, sueldos o alquileres”, sostuvo anoche el jefe comunal en declaraciones a El Diario.
El Programa de Comercios Cuidados asistirá con hasta $10.000 a aquellos locales que cuenten con habilitación y cuyos titulares tengan domicilio en el distrito. El beneficio alcanzará a aquellos cuya actividad se haya visto “interrumpida” por la pandemia.
Los $10.000 podrán ser utilizados tanto para el pago de alquileres, servicios o parte de salarios para aquellos que tengan empleados. Con solo uno de esos tres requisitos se podrá acceder al beneficio.
Además se eximirá de la Tasa de Servicios Generales a todos los comercios que abonen hasta $1.500. En tanto la totalidad de los locales alcanzados por el beneficio no pagarán la tasa de Publicidad y Propaganda. En ambos casos, mientras dure la pandemia.
La Tasa de Seguridad e Higiene depende de la facturación, por ende aquellos que tengan facturación cero, pagarán cero y el que vendió menos también abonará menos.
Con el proyecto el Municipio busca compensar a los sectores más afectados por la pandemia y recarga sobre aquellos que no han visto afectada su actividad, como los bancos, las grandes industrias esenciales que no pararon su actividad y los hipermercados, uno de los pocos sectores que ganó en medio de la pandemia.
“Hace falta un pacto social solidario, en el que los que tienen margen, los bancos, hipermercados o supermercados, que pudieron seguir funcionando durante esta pandemia y que incluso vieron incrementada su facturación, ayuden a sostener el comercio local, que ya no tiene restos para sostenerse”, señaló Achával.